14 Jul 2023

La informalidad superó el 70% en el Perú

En 2022, la tasa llegó al 67,7% en varones y al 74% en las mujeres y alcanzó a 13.4 millones de personas

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En la actualidad, conseguir un empleo digno se ha vuelto una tarea difícil para millones de personas en todo el mundo, especialmente en Latinoamérica. A pesar de los esfuerzos de muchos gobiernos por reducir la informalidad laboral en sus países, cada vez resulta más desafiante. En Perú, son millones de hombres y mujeres quienes no pueden cubrir sus necesidades básicas y se ven obligados a endeudarse o solicitar préstamos a bancos y familiares para subsistir.

Según un análisis del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima, basado en datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el año 2022 la Población Económicamente Activa (PEA) en Perú alcanzó los 18.6 millones de personas, lo que representa un incremento de 562,400 personas en comparación con años anteriores, es decir, un promedio de 1,540 personas por día.

De esa cifra total, 14.8 millones se encuentran en áreas urbanas y 3.8 millones en zonas rurales. Según el informe, se observa una tendencia decreciente en la PEA rural desde 2014, a excepción del 2021, lo que indica un mayor desplazamiento de la población rural hacia zonas urbanas en busca de mejores oportunidades laborales.

Aunque el aumento de la PEA puede ser considerado beneficioso, el problema radica en que actualmente no se generan suficientes empleos para absorber ese crecimiento, lo que resulta en un aumento de empleos informales.

En ese contexto, el INEI señaló que la población ocupada a nivel nacional, que incluye tanto empleos formales como informales, alcanzó los 17.8 millones de personas en el año pasado, lo que representa el 95.7% de la PEA y un crecimiento del 3.7% en comparación con el 2021. El empleo creció un 3.5% en hombres y un 4.1% en mujeres. En áreas urbanas, hubo un aumento del 6%, mientras que en la Costa el crecimiento fue del 7.5%, y en la Costa Centro, donde se encuentra Lima Metropolitana, fue del 8.6%. Sin embargo, en zonas rurales ocurrió lo contrario, con una disminución del 4.2%, siendo la Sierra la más afectada con una caída del 0.6% y la Selva del 0.4%. En el último trimestre del 2022, la Costa Sur tuvo una disminución del 1.5% y la Sierra Norte del 12.2%.

Lamentablemente, de los más de 17 millones de personas empleadas, el 75.7% se encuentra en empleos informales a nivel nacional. La informalidad es más alta en la Selva (81.4%), seguida de la Sierra Centro (77.8%) y la Sierra Sur (75.9%). En la Costa Centro, la tasa de informalidad se situó en 63.9%. Es importante destacar que la mayoría de los empleos informales en el país se concentran en áreas rurales.

Además, el informe destaca que la tasa de informalidad es mayor en mujeres que en hombres, alcanzando el 74% en el género femenino y el 67.7% en el masculino. En cuanto a las edades, la informalidad se concentra más en la población joven de 14 a 24 años (85.2%) y en aquellos trabajadores con menor nivel educativo, es decir, aquellos con educación primaria (91.3%). Estos empleados informales están principalmente en microempresas, específicamente en los sectores agropecuario (90%), pesca (87.8%), construcción (85.4%) y comercio (76.4%).

En este año 2023, aunque aún no se disponen de cifras a nivel nacional, el Instituto Nacional de Estadística e Informática presentó un informe técnico sobre la situación del mercado laboral en Lima Metropolitana, en el cual se reflejan los problemas relacionados con el empleo juvenil. En el trimestre móvil de febrero-marzo-abril, la PEA de jóvenes de 14 a 24 años en la capital sufrió una disminución del 8.1%.

Un estudio de ComexPerú, basado en la información del INEI, señaló que la creación de empleos formales sigue siendo una de las principales preocupaciones en el ámbito laboral. Ante esta situación, se recomienda priorizar políticas que promuevan el crecimiento económico y la generación de empleos de calidad, tomando en cuenta la dinámica de las actividades económicas y promoviendo la capacitación y formación de los trabajadores.

La informalidad en los negocios también es una preocupación. Según el estudio "Informalidad 360°" del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima, de los 9.1 millones de unidades productivas de hogares existentes en el país en el 2022, 5.5 millones se encontraban en la informalidad. Esto representa un aumento del 7.9% en comparación con el 2021. En cuanto a los negocios informales, se observa que el 39% tiene una antigüedad inferior a un año, el 28% tiene entre 1 y 5 años, y solo el 7% supera los 20 años.

La mayor concentración de negocios informales se encuentra en Lima con un 35.9%, seguido por Piura con un 7.2%, La Libertad con un 6.1% y Lambayeque con un 5.0%. En cuanto a las actividades económicas desempeñadas por estos negocios informales, la mayoría se encuentra en el sector del comercio (34.2%), seguido por el transporte y almacenamiento (22.2%) y la industria del alojamiento y restaurantes (12.6%).

La realidad es que la informalidad laboral está en aumento en el país, lo cual es una situación sumamente preocupante. Es urgente establecer acuerdos públicos-privados y políticas que generen más empleo, no solo formal, sino también digno. Es fundamental priorizar el crecimiento económico y la generación de empleos de calidad, tomando en cuenta las dinámicas económicas y promoviendo la capacitación y formación de los trabajadores.

La lucha contra la informalidad requiere un enfoque integral que aborde tanto la generación de empleo como la mejora de las condiciones laborales. Solo a través de esfuerzos conjuntos y políticas efectivas podremos lograr una disminución significativa de la informalidad y brindar oportunidades laborales dignas para todos los peruanos.





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