Desde México (AFP)

Investigan a exjefe de seguridad de petrolera estatal mexicana por robar combustible

Un general del ejército mexicano que era responsable de la seguridad de instalaciones de la petrolera estatal Pemex es investigado por su posible participación en robo de combustible de la compañía, dijo este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador.

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Filas en gasolineras en Morelia, en el estado mexicano de Michoacán, el 8 de enero de 2019, ante peligros de desabastecimiento tras el plan del gobierno contra el robo de combustible - AFP/AFP
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Un general del ejército mexicano que era responsable de la seguridad de instalaciones de la petrolera estatal Pemex es investigado por su posible participación en robo de combustible de la compañía, dijo este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador.

"Estaba a cargo de la seguridad de Pemex (...) Está en una lista de personas que se investigan con relación a esto, sin que haya todavía nada definitivo", afirmó el mandatario en conferencia de prensa.

La información surge mientras el gobierno del izquierdista, de 65 años, desarrolla un plan contra este delito que le generó a Pemex pérdidas por unos 3.000 millones de dólares en 2017 y que involucraría también a sanguinarios cárteles del narcotráfico.

El robo de hidrocarburos, conocido en México como "huachicoleo", se concentra en la región central del país y ha generado violencia debido a enfrentamientos entre delincuentes y fuerzas de seguridad, pero también por las disputas entre criminales.

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Gigantescas colas de autos aguardan para cargar gasolina en una estación de la ciudad mexicana de Zapopán, estado de Jalisco, el 6 de enero de 2019 (AFP/AFP)

López Obrador sostiene, sin embargo, que la principal causa del robo de combustible es la corrupción de autoridades y funcionarios.

"Se está investigando a todos los que tienen que ver o tuvieron que ver con estas actividades (...) es una investigación a fondo, conjunta, de todas las dependencias", agregó.

El plan del mandatario, anunciado en diciembre, ha provocado escasez de gasolina desde el fin de semana pasado en varios estados centrales por la decisión de cerrar los ductos de transporte para frenar su bombeo ilegal.

El reparto de gasolinas se está haciendo mediante camiones cisterna que resultan lentos e insuficientes, lo que ha provocado desabastecimiento en las gasolineras e incluso el cierre de muchas de ellas en estados como Jalisco, Guanajuato y Querétaro, donde se vieron largas filas de automovilistas desesperados por conseguir combustible.

El pánico por la eventual escasez llegó este martes a Ciudad de México, donde medios locales y publicaciones de redes sociales daban cuenta de gasolineras atestadas.

"Fueron los políticos los que autorizaron el cierre (de los ductos) pero ahora ellos se lavan las manos", dijo a la televisora Milenio Jorge González, un conductor que llevaba más de una hora haciendo fila en una gasolinera del oeste de la capital, donde circulan unos 5,5 millones de vehículos.

Pemex rechazó que la Ciudad de México esté sufriendo desabastecimiento de hidrocarburos e invocó a la población "a no realizar compras de pánico ni caer en especulaciones de escasez de combustibles", según un comunicado difundido por Twitter.

López Obrador asegura que se va logrando el objetivo de evitar el robo. Informó que antes del plan se robaba diariamente el equivalente a 787 camiones cisternas por día y que la cifra se ha reducido a 177.




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