La tasa de desempleo en España repuntó en dos décimas en el primer trimestre de 2018 hasta el 16,7% de la población activa, un fenómeno especialmente marcado en el sector servicios, según las estadísticas oficiales publicadas este jueves.
La tasa de desempleo en España repuntó en dos décimas en el primer trimestre de 2018 hasta el 16,7% de la población activa, un fenómeno especialmente marcado en el sector servicios, según las estadísticas oficiales publicadas este jueves.
El Instituto nacional de Estadística (INE) censó a 29.400 parados más que en el trimestre precedente, elevando a 3,79 millones el número total de personas desempleadas en la cuarta economía de la zona euro.
91.300 personas perdieron su empleo en el sector de los servicios, que incluye la industria turística española donde reina una fuerte precariedad, pero la destrucción de empleo fue generalizada: 8.600 en la industria, 7.600 en la agricultura y 6.300 en la construcción.
Las islas Baleares (noreste) y Andalucía (sur) fueron las regiones donde más subió el desempleo, mientras que Cataluña (noreste), el archipiélago de las Canarias (frente a África noroccidental) y Madrid (centro) registraron los mayores descensos.
La tasa de empleados con contrato temporal, faceta en la que España ostenta el récord europeo, retrocedió ligeramente del 26,7% al 26,1% en el último trimestre.
El porcentaje de desempleados de larga duración (un año o más) aumenta del 48,5% al 49,8%, lo que representa alrededor de 1,8 millones de personas.
A pesar de la fuerte caída del desempleo tras alcanzar un pico del 27% en 2013, España sigue siendo el segundo peor país de la zona euro sólo por detrás de Grecia.
En 2017, la tasa de paro bajó del 18,6% al 16,5% beneficiándose especialmente de un nuevo año récord en el sector turístico.
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