Las acciones de la minera brasileña Vale en la Bolsa de Sao Paulo se hundían el lunes más de un 15%, en la primera sesión desde la rotura de un dique de su propiedad, que el viernes dejó decenas de muertos.
Las acciones de la minera brasileña Vale en la Bolsa de Sao Paulo se hundían el lunes más de un 15%, en la primera sesión desde la rotura de un dique de su propiedad, que el viernes dejó decenas de muertos.
Hacia las 11H00 locales (13H00 GMT), los papeles de Vale se cotizaban a 47,34 reales, con una caída de 15,64% respecto al cierre del jueves, último día hábil. En las primeras operaciones, habían llegado a caer 19,86%.
Otras empresas del sector minero y siderúrgico estaban afectadas en el índice Ibovespa, que cedía 1,87%.
El mayor derrumbe del pregón lo encajaba Bradespar (-17,71%), un holding con participación en el capital de Vale. La Compañía Siderúrgica nacional caía 2,51%.
El viernes pasado, tras la rotura del dique en la localidad de Brumadinho (estado de Minas Gerais), los títulos de Vale en Nueva York se desplomaron un 8%.
Vale, primer productor mundial de mineral de hierro, anunció la madrugada del lunes la suspensión del pago de dividendos a sus accionistas, entre otras medidas adoptadas tras la tragedia que hasta el momento dejó 60 muertos y 292 desaparecidos.
En esa reunión también se decidió suspender el programa de recompra de Vale de sus propias acciones, así como el pago de variables en la remuneración de los ejecutivos de la firma.
La justicia brasileña bloqueó durante el fin de semana 11.000 millones de reales (unos 3.000 millones de dólares) de la minera, para compensar perjuicios y daños ambientales.
Vale fue sancionada además hasta el momento con tres multas por un total de 449 millones de reales.
Según el diario económico Valor, los activos bloqueados representan aproximadamente la mitad de los 24.400 millones de reales de los que Vale disponía en caja a finales de septiembre y "aumenta mucho las cuentas a pagar".
En septiembre pasado, los compromisos hasta septiembre de 2019 eran de 5.500 millones de reales, entre el principal y los intereses.
La empresa tenía además un programa de recompra de sus propias acciones, por un monto de 1.000 millones de dólares.
Esta es la segunda tragedia en la que se ve involucrado el grupo brasileño en poco más de tres años, después de la rotura en noviembre de 2015 de un dique de la empresa Samarco, copropiedad de Vale y de la anglo-australiana BHP Billiton.
Ese accidente, en el municipio de Mariana (a unos 125 km de Brumadinho), dejó 19 muertos y generó un devastador aluvión de residuos mineros que llegó hasta el mar, atravesando dos estados, a lo largo del Rio Doce.
La empresa logró desde entonces recomponer sus finanzas. Desde noviembre de 2015 hasta el jueves pasado, su valor en bolsa subió 258%.
Especialistas citados por medios brasileños estiman que el impacto financiero inmediato de la tragedia será menor que el ocasionado en la imagen de la compañía.
El actual presidente de Vale, Fábio Schvartsman, asumió el cargo en 2017, con el lema "Mariana, nunca más". Un programa que quedó en la nada con este nuevo desastre y que según analistas compromete la renovación de sus cargos en 2019.
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