
La mina de oro todavía no había abierto, pero las protestas de la población fueron tan contundentes que los inversores chinos decidieron abandonar el yacimiento y desaparecieron sin pedir nada a cambio, dejando atrás solo tiendas abandonadas y colillas de cigarrillo.
#Economía #Minería #China #Madagascar #Manifestaciones
ENCUENTRA MAS FOTONOTICIAS
Este sitio usa imágenes de Depositphotos