Las Drogas

El Éxtasis

Llamada droga de club, es una droga sintética alucinógena y estimulante, cuyo uso puede generar un estado de alteración permanente. Provocando efectos perturbadores. Es usada por adolescentes y adultos jóvenes en los clubes nocturnos, bares, fiestas "rave" o en el contexto de la música "trance"


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extasis


El éxtasis es una droga sintetizada o droga de diseño (compuesto de origen sintético o artificial), también llamada entre los consumidores XTC, MM, Adán, MDM, bicho, equis, banana, split, picapiedra, bola de nieve, snoopy, bola blanca, tapón estrellado, popeye, torpedo, Doctor, M, o MS.

Características

Su presentación es en forma de polvo blanco cristalino, tabletas o comprimido que no superan el tamaño de una aspirina; de color rosáceo, blanco, amarillo o azul. Algunos distribuidores las registran con una marca como: estrella de 5 puntas, el conejo de play boy, el muñeco de seven-up, una manzana, un delfín, un ancla, una calavera, la oz y el martillo junto a las siglas cccp, una paloma, un tanque, snopy, un picapiedra, entre otros.

Sustancia prohibida

Fue considerada en 1986 por la ONU como una de las sustancias adictivas no permitidas para el uso médico. Debido al consumo de esta droga sintética, en ciertos países Europeos como España e Italia, se fue incrementando el número de accidentes nocturnos con fatales consecuencias. En tanto que en el Reino Unido ha sido calificada entre las drogas duras (alto poder adictivo), al igual que la heroína y la cocaína y en Italia está calificada en el mismo rango que el opio.

Tolerancia y dependencia

Los consumidores más frecuentes tienen que ingerir dosis cada vez más altas para tener los mismos efectos (tolerancia). Siendo los efectos “buscados” cada vez más difíciles de alcanzar, por tal motivo tienen que mezclar el éxtasis con otras drogas como cocaína o cannabis.

Lo alarmante es que mientras se va aumentando la dosis, también aumentan sus efectos tóxicos pero no los efectos “buscados”.

El éxtasis desarrolla una tolerancia directa, provocando euforia, reducción de la sensación de fatiga, retraso del sueño, reducción de la sensación de hambre y sed, entre otros.

Cuando se suprime su consumo de éxtasis, se desarrolla un estado de ansiedad generalizada, seguida de una sensación de agotamiento, depresión, pesimismo, irritabilidad y actitud negativa (abstinencia). Algunos consumidores describen este caso como “un infierno” y que sólo su consumo podrá recuperar sensaciones pasadas.

Absorción

Se absorbe rápidamente de forma oral y su acción se inicia muy de prisa. Sus efectos aparecen a los 20 o 60 min. y tienen una duración de aproximadamente 4 a 6 horas con dosis moderadas; con dosis altas puede durar 48 horas o más.

Aunque su duración sea prolongada puede ser consumida en más de una oportunidad durante el día, lo que incrementa su peligrosidad.

Efectos y riesgos

Aumenta la percepción visual, auditiva y táctil. Además causa, de manera artificial un sentimiento emocional placentero y la persona se muestra bastante extrovertida. La persona consumidora es capaz de cometer actos ilícitos para obtener dinero suficiente para adquirirlo. Quita las ganas de beber alcohol; su consumo paralelo bloquea los efectos en algunos receptores y la sobredosis produce efectos desagradables como taquicardia, intranquilidad y falta de apetito.

Por otro lado, produce artificialmente una intensa sensación de bienestar, de afecto hacía las personas de su entorno, de aumento de energía, y en ocasiones alucinaciones. Los efectos adversos que provoca su consumo incluyen sensación de malestar general, pérdida de control sobre uno mismo, deshidratación, pérdida de peso y pérdida de memoria.

Quienes consumen esta droga padecen y son víctimas de horribles momentos de angustia y pánico al momento de dormir. Cuando no la toman se muestran más deprimidos y con el ánimo más bajo que cualquier otra persona. Puede decirse por eso que existe una evidente dependencia que obliga a la persona a seguir consumiéndola con lo que refuerza el ciclo adictivo, necesitando aumentar la dosis, llegando en muchos casos a la conocida sobredosis que genera lesión irreversible de la actividad cerebral, cardiovascular o lo conduce hacia la muerte.

Dado que el sistema cardiovascular es el principal afectado, la taquicardia, sudoración, sequedad de la boca y palpitaciones son algunos de los síntomas de quienes se drogan con éxtasis.

Otro sector de consumidores padece de alucinaciones e insomnio. Su apodo de “droga del amor” está relacionada con su capacidad para aumentar la percepción y supuestamente potenciar las relaciones sexuales. Dosis elevadas han producido casos de psicosis aguda (romper con la realidad) y reacciones paranoicas (pensar que te persiguen o quieren hacerte daño).

Algunos expertos señalan que la acción de la droga en el cerebro puede aumentar la sensación de calor corporal (“golpe de calor” o “choque térmico”), lo que sumado al ejercicio físico intenso, a la sudoración y la deshidratación, más el calor de los ambientes en los que se consumen, convierten a esta droga en una arma mortal. El golpe de calor que acompaña a las muertes (intoxicación por éxtasis), es causada por una coagulación dentro de los vasos sanguíneos, mal funcionamiento del hígado, riñones y el sistema cardiovascular.

Fuente:[Minedu]

 




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