Aurora Boreal
La aurora boreal es un fenómeno natural de luces brillantes que se observan en el cielo nocturno, principalmente en las regiones cercanas al Polo Norte.

Este espectáculo de luces se forma cuando partículas cargadas del viento solar chocan con los gases en la atmósfera terrestre, principalmente oxígeno y nitrógeno. Este fenómeno también ocurre en el hemisferio sur, donde se conoce como aurora austral.
Características de la aurora boreal
Colores:
Las auroras suelen ser de color verde, que es el más común. Sin embargo, también pueden tener tonos rojos, violetas, rosas, azules y amarillos, dependiendo de la altitud y el tipo de gas con el que interactúan las partículas solares.
Verde: Es el color más frecuente, causado por la colisión de partículas con el oxígeno a altitudes de entre 100 y 300 km.
Rojo: Se observa cuando el oxígeno está a mayor altitud, por encima de los 300 km.
Azul y violeta: Se generan cuando las partículas chocan con el nitrógeno.
Formas:
Las auroras pueden aparecer en formas de cortinas, arcos, espirales o ráfagas rápidas que parecen moverse a través del cielo.
Causas
La aurora boreal se forma cuando el viento solar (partículas cargadas procedentes del Sol) llega a la magnetosfera de la Tierra. El campo magnético de la Tierra redirige estas partículas hacia los polos, donde interactúan con los gases de la atmósfera, produciendo la liberación de energía en forma de luz.
Dónde se observan
Las auroras boreales son visibles en las regiones más cercanas al Círculo Polar Ártico, como:
- Noruega (especialmente en Tromsø)
- Suecia (región de Laponia)
- Finlandia
- Islandia
- Alaska (EE. UU.)
- Canadá (norte de Yukon y Territorios del Noroeste)
- Groenlandia
Época ideal para observarla
El mejor momento para observar la aurora boreal es durante el invierno, entre septiembre y marzo, cuando las noches son más largas y oscuras en el hemisferio norte. Las auroras suelen ser más intensas en los periodos de mayor actividad solar, que siguen un ciclo de 11 años aproximadamente.