Mientras aparecen drones patrullando los cielos o repartiendo paquetes, el grupo francés Parrot anunció que comercializará este verano dos mini-drones para el entretenimiento que se manejan desde un dispositivo móvil.
"Queríamos crear robots conectados para la generación de teléfonos inteligentes y de tabletas", explicó a la AFP la portavoz Vanessa Loury durante una presentación el martes en Nueva York.
El 'Rolling Spider' posee cuatro hélices y puede adaptarse sobre dos ruedas laterales, para rodar en círculos sobre el suelo o en las paredes.
Otro modelo, el 'Jumping Sumo' hace círculos también, pero puede saltar hasta 80 centímetros de altura o a lo largo.
Ambos se controlan desde una aplicación móvil compatible con los sistemas operativos iOS (iPhone, iPad) y Android, y se prevé una versión para Windows en septiembre.
El primero se comunica vía Bluetooth en un radio de 20 metros y puede tomar fotografías durante el vuelo. El segundo utiliza una conexión wifi, que permite controlarlo desde la habitación de al lado y ver en directo en el teléfono inteligente las imágenes que filma con su cámara integrada.
La autonomía de la batería recargable es muy corta, 8 minutos y 20 minutos respectivamente. Los dos dispositivos, que pueden ser utilizados sólo por mayores de 16 años, se venderán desde mediados de julio en Francia y en agosto en EEUU.
Además de estos mini-drones de juguete, Parrot trabaja también en los drones civiles y profesionales, como por ejemplo su eBee, fabricado en asociación con la empresa suiza Sensefly y utilizado con fines de cartografía o en agricultura.
"Estamos en el mercado de los drones desde hace casi 5 años", dijo Peter George, vicepresidente de Parrot a cargo de las ventas en el continente americano, y agregó que la firma ha vendido unos 750.000 en el mundo, la mitad de los cuales en EEUU.