Gigante Wal-Mart sufre prudencia de consumidores estadounidenses
El gigante de la distribución Wal-Mart, uno de los barómetros del consumo estadounidenses, no se ha beneficiado de la caída de los precios del petróleo debido a la prudencia de los hogares, que prefieren utilizar sus ahorros para pagar deudas en vez de gastar.
El gigante de la distribución Wal-Mart, uno de los barómetros del consumo estadounidenses, no se ha beneficiado de la caída de los precios del petróleo debido a la "prudencia" de los hogares, que prefieren utilizar sus ahorros para pagar deudas en vez de gastar.
Las ventas de sus marcas y tiendas aumentaron solo 1,1% en el mercado estadounidense en los últimos tres meses, correspondientes al primer trimestre de su ejercicio fiscal 2015/2016, anunció la compañía el martes. Las proyecciones más optimistas anticipaban un incremento de 1,5%.
"Las encuestas de opinión recientes muestran que los consumidores estadounidenses utilizan sus créditos impositivos y ahorros que logran debido al bajo precio de la gasolina para pagar sus deudas o ahorrar", explicó el director general Doug McMillon, reconociendo que las ventas no están en el nivel esperado.
Muchos observadores creen que las grandes cadenas de distribución son las que estarán entre las que se benefician de la recuperación del mercado laboral en Estados Unidos, del incremento de los pequeños salarios y de la caída de más del 50% en el precio del petróleo desde junio pasado. Según sus cálculos, los consumidores volcarían el ahorro en gasolina a otros gastos de consumo.
Pero esta apuesta parece haber fallado ya que "los hogares siguen siendo un poco prudentes", indicó Wal-Mart, cuando esta prudencia pesó en su desempeño trimestral que resultó por debajo de lo esperado tanto en ganancias como en ingresos.
Entre febrero y fines de abril el beneficio neto fue de 3.340 millones de dólares, en baja de 7% en un año, lo que representa un beneficio por acción ajustado, referencia de Wall Street, de 1,03 dólares, inferior a los 1,04 dólares esperado en promedio por los analistas.
Los ingresos trimestrales alcanzaron 114.820 millones de dólares, casi estables en relación al mismo período del año pasado pero inferiores a los 116.300 millones esperados.
- Efecto dólar -
Wal-Mart, que quiere avanzar en el terreno internacional, debe además -al igual que las otras transnacionales estadounidenses- enfrentar el problema de la apreciación del dólares frente a las otras divisas.
El dólar fuerte generó así un retroceso de 6,6% en un año, a 30.300 millones de dólares, de las ventas realizadas fuera de Estados Unidos. Sin incluir el efecto del tipo de cambio, subieron 3,4% impulsadas por China, México, Canadá y Japón. Aunque el grupo resiste en el Reino Unido, enfrenta de todas formas una competencia agresiva y promete ajustar sus precios para mantenerse competitivo.
En el conjunto del ejercicio los efectos del tipo de cambio reducirán en 14.000 millones de dólares los resultados, contra 10.000 millones en el periodo anterior, advirtió Wal-Mart que espera un beneficio por acción en el segundo trimestre de 1,06 a 1,18 dólares.
Wal-Mart también está pagando las inversiones que hace para adaptarse a los nuevos hábitos de los consumidores y los costos del incremento de los salarios de medio millón de sus empleados (40% de sus efectivos), desde abril.
La cadena desbloqueó más de 1.000 millones de dólares para modernizar su cadena de suministros, sus tecnologías y remodelar sus tiendas.
Además, abre más tiendas barriales y quiere fortalecer su oferta en el comercio en línea con el lanzamiento en los próximos meses de un servicio de entrega ilimitado a 50 dólares anuales, para competir con la exitosa oferta Prime (99 dólares) de Amazon.com.