Aquí tienes cuatro recomendaciones para hacer frente a una desaceleración económica

La recesión económica que afecta actualmente a Perú ha traído consigo una serie de consecuencias, como la reducción de oportunidades de empleo, la disminución de alternativas para los negocios y una menor capacidad de gasto en alimentos. En este contexto, es fundamental que la población esté preparada para enfrentar estos desafíos, especialmente en el marco del Día Mundial del Ahorro.

El país ha experimentado dos trimestres consecutivos con un Producto Interno Bruto (PIB) en declive, según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), lo que ha llevado a la clasificación de una recesión económica. Esta desaceleración se traduce en una disminución de la inversión privada, el consumo de bienes y servicios, así como la generación de empleo. Aunque el Ministro de Economía y Finanzas (MEF), Alex Contreras, ha mencionado la posibilidad de una reactivación económica en los últimos meses del año y un repunte en el primer trimestre de 2024, esto dependerá en gran medida de las medidas que se implementen.

En los últimos años, los niveles de ahorro en Perú han disminuido, según datos de la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO). En 2019, los niveles de ahorro se situaban en el 20.5%, pero se redujeron al 2.4% en 2020, llegando incluso al 0.4% en Lima Metropolitana.

Ante este panorama, es crucial que las familias desarrollen hábitos financieros sólidos. El coordinador académico de Administración de Negocios Bancarios de la Escuela de Educación Superior Certus, José Kohagura, comparte cuatro consejos para evitar gastos innecesarios durante períodos de desaceleración económica:

• Evitar gastos innecesarios: Con la disminución de ingresos y la falta de oportunidades de trabajo, es fundamental que las familias establezcan hábitos financieros, desde la distribución de ingresos hasta la utilización de productos financieros. La elaboración de un presupuesto puede ser un punto de partida para gestionar el dinero de manera efectiva.
• Reducir deudas: En tiempos de recesión, es esencial mantener una gestión financiera personal o familiar estable para evitar acumular deudas adicionales. Ponerse al día con las deudas y cumplir con las obligaciones financieras pendientes es fundamental. No se recomienda destinar más del 35% de los ingresos al pago de deudas.
• Buscar otras fuentes de ingresos: Dado el aumento del desempleo, es posible que las personas se vean obligadas a buscar empleos temporales o precarios. Aunque buscar ingresos adicionales es importante, es fundamental contar con una fuente segura para cubrir los gastos familiares.
• Contar con un fondo de emergencia: El ahorro se convierte en un respaldo crucial para hacer frente a imprevistos como enfermedades, emergencias familiares y, en este caso, una recesión económica. Aunque se espera una mejora en la situación económica de Perú a finales de año, es esencial disponer de un fondo de emergencia que pueda cubrir los gastos fijos durante los primeros 3 a 6 meses, en caso de ser necesario.