FRANKENSTEIN Y EL HOMBRE LOBO

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Dos ladrones de tumbas irrumpen en la cripta de los Talbot y abren la tumba de Lawrence; cuando la luz de la luna llena lo ilumina, éste vuelve a la vida, matando a uno de los ladrones. A la mañana siguiente, Larry es hallado inconsciente en un callejón, mostrando en la cabeza las heridas que ocasionaron su muerte, por lo que es trasladado a un hospital. Tras una primera transformación, Larry toma conciencia, una vez más, de su condición de hombre lobo, por lo cual huye del centro y va en busca de Maleva. Ésta le informa que su salvación, acaso, pueda proporcionarla el doctor Frankenstein… Comentario The Wolf Man gozó de un gran éxito de público -en España, que uno sepa, no consiguió estreno, aun cuando en muchas enciclopedias es citada por el título español de El hombre lobo, habiendo sido exhibida varias veces en televisión y editada en vídeo-, así pues una inmediata secuela había de venir, aún con la muerte del licántropo al final del film. Dos años después se nos ofrece Frankenstein y el hombre lobo, continuación directa, por un lado, de Ghost of Frankenstein [tv: El fantasma de Frankenstein, 1942], de Erle C. Kenton, y por otro de la referida. Ambientada cuatro años después, ofrece guión, una vez más, de Curt Siodmak, y la debilidad de su tratamiento se hace de nuevo patente, así resulta caótica la entrada y salida de personajes, a conveniencia de la historia -en especial una muy desaprovechada Maleva-. George Waggner, productor y director de la previa, ahora sólo produce, dejando la realización en manos de Roy William Neill, responsable de la anterior entrega de Frankenstein. Una vez más, lo mejor está en el trabajo de ambientación, con una cuidada fotografía y unos decorados de aire cuasi-onírico. Simpático y atractivo para el aficionado, se trata de un producto inferior en calidad al previo, y que de nuevo exhibe lamentables fallos de raccord, quedando muy ostensible cuando Larry escapa del hospital en camisón, vaga por las calles convertido en hombre lobo con camisa y pantalón negros, y reaparece en la cama con el camisón, y hace que Talbot y Maleva se trasladen a desde Inglaterra a Vasaria, evidente población centroeuropea -con ambientación a lo Heidi- montados en un carromato. Sin embargo, lo peor de la película es la lamentable interpretación del mítico Bela Lugosi, aquí una mera sombra de sí mismo, incorporando al monstruo de Frankenstein como un robot mecánico, sin vida, sin credibilidad, y exhibiendo la clásica imagen de la que siempre se ha dotado a las parodias de la creación de Mary Shelley; según parece, por otro lado, en las copias de pre-estreno el personaje hablaba, pero ante las reacciones hilarantes del público por el acento de Lugosi sus escenas de diálogo fueron eliminadas; también se suprimió la acotación de la ceguera del personaje, de ahí sus torpes procederes. Lon Chaney, por su parte, prosigue con su aire torturado y victimario, intentando buscar la muerte una vez ha descubierto que no tiene posibilidad de morir... Anécdotas *En cierto modo, esta es la última entrega del ciclo Frankenstein, pues el posterior díptico La zíngara y los monstruos (House of Frankenstein, 1944) y La mansión de Drácula (House of Dracula, 1945), ambas de Erle C. Kenton, ofrece otro arranque. Por su parte, la siguiente del ciclo Larry Talbot es la primera de las citadas. * Bela Lugosi rechazó el papel de monstruo en el primer film de la saga Universal. * Lon Chaney, aquí hombre lobo, fue el monstruo en Ghost of Frankenstein. Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

Título original: FRANKENSTEIN MEETS THE WOLF MAN

Esta película se estrenó hace 81 años.