Santoral - 06 de febrero
Fecha en que se recuerda el nombramiento de santos por parte de la Iglesia Católica.
Santa Dorotea
6 de febrero:
Beata María Teresa Bonzel
Nació el 17 de setiembre de 1830, en Olpe, Westfallia, Alemania. Desde joven tuvo gran devoción por la religión. En su juventud se interesó por servir a los pobres, por lo que el obispo Konrad Martín le sugirió la formación de una congregación. El 20 de julio de 1863, la Congregación de las Hermanas de San Francisco de la Adoración Perpetua en Olpe fue aprobada por la iglesia. Al hacer sus votos tomo el nombre de María Teresa, dejando atrás su nombre original, Regina Christine Wilhelmine Bonzel.
El 6 de febrero la madre María Teresa falleció, su vida estuvo entregada a la caridad y el servicio.
Beato Alfonso María Fusco
Nació el 23 de marzo de 1839 en Angri, provincia de Salerno, sus padres eran campesinos, fue criado dentro de la religión, tuvo profesores sacerdotes, a los 7 años recibió la primera comunión y luego la confirmación. Desde los 11 años manifestó su deseo de ser sacerdote.
El 29 de mayo de 1863 fue ordenado sacerdote por el arzobispo de Salerno, destacó por su dedicación al servicio litúrgico. Alfonso tenía el anhelo de fundar un instituto de religiosas y un orfanato para niños y niñas.
El 25 de setiembre junto con Maddalena Caputo y otras tres jóvenes fundaron la Congregación de las Hermanas Bautistinas del Nazareno.
Dirigió su instituto con gran sabiduría, junto a Maddalena Caputo que tomó el nombre de Sor Crocifissa, la primera superiora del instituto.
Con los años abrió nuevas casas en la región de la Campania y en otras regiones de Italia.
El 5 de febrero se sintió mal en la noche y recibió los sacramentos. La mañanad el 6 de febrero murió en su cama acompañado por las relligiosas.
Beato Ángel de Furci
Nació en Furci, provincia de Chieti, en Italia, en 1246. Perteneció a una familia acomodada, se cuenta que sus padres lo nombraron Ángel porque su nacimiento fue por intercesión del arcángel San Miguel, ya que los padres eran estériles.
De pequeño fue confiado a un tío materno, abad del monasterio benedictino en Cornaclano.
En 1622 luego de la muerte de su familiar y de su padre, ingreso en la Orden Agustiniana donde hizo los estudios reglamentarios y luego accesdio al sacerdocio.
Fue un gran orador, en 1287 fue elegido superior de la provincia napolitana.
Murió en el convento de San Agustín a la Zecca de Nápoles en 1327. Fue incluido entre los santos patronos de la ciudad.
Beato Francisco Spinelli
Nació en Milán, Italia. Se ordenó sacerdote en 1875.
Fundó en Bérgamo el Instituto de las Hermanas Adoratrices del Santísimo Sacramento. Siempre recomendó a sus pupilas a ser caritativas y adorar a Dios sobre todas las cosas.
Falleció en Rivolta. Fue beatificado el 21 de junio de 1992, en el santuario de Caravaggio.
San Amando de Maastricht
Nació en el bajo Poitou, en el año 584. A los veinte años se retiró a un monasterio en la Isla de Yeu, cerca de la de Re. Su padre quiso que regresara y lo amenazó con desheredarlo, sin embargo fue en vano, el santo respondió Cristo es mi única herencia.
Se ordenó en Tours, luego fue a Bourges, allí vivió quince años bajo la dirección del obispo San Austregisilo.
Después de una peregrinación a Roma, regresó a Francia y fue consagrado obispo sin sede fija en 629. Predicó en Flandes e hizo una visita a los eslavos de Carinthia.
Reprendió al rey Dagoberto I por sus crímenes y fue desterrado. Pero lo llamó otra vez para el bautismo de su hijo, Sigeberto, que sería rey y santo.
Fue un gran misionero y padre del monasticismo en Bélgica. Fundó casas en Elnone, cerca de Tournai, fundó también San Pedro en Mont-Blandin en Gante. Continuó con su labor evangelizadora hasta una edad avanzada, después, debido a su salud, se retiró a Elnone, donde fue abad por cuatro años.
San Guarino de Palestrina
Nació en 1080, se ordenó sacerdote a los 24 años, decidiendo seguir la Regla de san Agustín, siendo canónigo regular lateranense, en el convento de la Santa Cruz de Mortara.
Antes de dejar su ciudad natal, entregó sus bienes para la construcción de un asilo.
A los 59 años fue designado como Obispo de Pavia, sin embargo, permaneció escondido por sentirse indigno de ese nombramiento, hasta que fue elegido otro prelado.
En el año 1144, el papa Lucio II lo nombró obispo de Palestrina. Tuvo que aceptar y llegó a ser cardenal.
Murió el 6 de febrero de 1158, a los 78 años.
San Mateo Correa Magallanes
Nació en tepechitlán el 22 de julio de 1866, ingreso al seminario de Zacatecas y fue por 4 años portero del lugar. Debido a su buena conducta se le concedió una beca por lo que pudo ser admitido como alumno.
Fue ordenado sacerdote en 1893 y fue capellán en haciendas y parroquias.
Fue párroco de Colotlán y fue perseguido por los revolucionarios maderistas. En 1926 llegó como párroco a Valparaíso y poco después llegan las fuerzas gobiernistas al mando del general Ortiz. Se produjo una revuelta en el pueblo, por ello el sacerdote tuvo que huir. Sin embargo fue arrestado y lo condujeron a Durango donde fue encerrado en una jefatura militar. El general Ortiz mandó al padre Correa a confesar a personas que iban a ser fusiladas y le exigió que le revelara las confesiones. El sacerdote se negó, por ello se ordenó su ejecución.
San Pablo Miki y compañeros
Pablo Miki fue un catequista jesuita nacido entre los años 1564 y 1566, de una familia de Kyoto. Quería ser sacerdote pero no podía serlo porque la única diócesis que había no tenía obispo. En 1587, el emperador Toyomi Hideyoshi que se propuso conquistar Corea, publicó un decreto de expulsión a los misioneros cristianos.
Algunos misioneros permanecieron en el país de incógnitos, mientras que algunos franciscanos españoles fueron bien recibidos por Hideyoshi, luego vino la ruptura definitiva. El 9 de diciembre se arrestaron a 6 franciscanos, tres jesuitas y diecisiete laicos terciarios franciscanos.
Luego de cortarles el lóbulo izquierdo, los 26 fueron llevados de Meaco a Nagasaki , fueron crucificados en una colina el 5 de febrero de 1597.
San Pedro Bautista Blásquez
Nació en San Esteban del Valle, en el año 1542, fue ordenado sacerdote y destinado al apostolado de la predicación, un día presentó su moción a los superiores y obtuvo el permiso para incorporarse a un grupo de religiosos que partían a México.
Allí trabajó por casi 3 años. Tenía como objetivo China y Japón. Viajó a Manila, Filipinas, y se entregó a la misión, visitó a enfermos y los curaba, edifica residencias y hospitales.
Viajó a Japón donde él y sus compañeros franciscanos se dedicaban a curar leprosos, junto con los más pobres. Tiempo después fueron conminados a abandonar la misión, el historiador Jesuita padre Frois, tacha a los franciscanos de imprudentes y temerarios por su metodología misionera. Y el obispo, Pedro Martínez, de la Compañía de Jesús, les prohíbe toda actividad apostólica y asistencial.
Con una carta dirigida al obispo le dice que no dejarán Japón hasta que lo mande el papa y el rey.
Ellos se mantuvieron al descubierto, pero fueron encarcelados en Japón, el 3 de enero de 1597. Se les torturó y corto el lóbulo de la oreja izquierda en señal de vergüenza. Fueron crucificados en la colina de Nishizaka, el 5 de febrero de 1597, ante miles de personas.
San Vedasto (Vaast) de Arras
Nació en Francia occidental en el años 453, vivió en la diócesis de Toul, fue ordenado sacerdote por San Remi, arzobispo de Reims, quien lo delegó a preparar a Clovis para recibir el Sacramento del Bautismo.
En el año 499, fue consagrado primer Obispo de Arras, diez añs después lo comprometieron al cuidado de la diócesis de Cambrai.
Murió en el 540 y fue enterrado en su catedral en Arras.
Santa Dorotea y San Teófilo
Dorotea nació en Cesarea de Capadocia, a fines del siglo III, cuando Diocleciano a nombre del emperador Maximiano Galerio gobernaba el imperio romano.
Ella era cristiana y tenía fama de santidad, lo que llegó a oídos de Saprizio, perseguidor de crisitanos, que la llamó para interrogarla, Dorotea demostró su devoción a Dios, entonces Saprizio llamó a dos hermanas, Crista y Calixta quienes habían renunciado a su fe y les ordenó que convenzan a Dorotea de abandonar el cristianismo. Pero sucedió al contrario, Dorotea logró que las hermanas volvieran a ser cristianas, lo que provocó la furia de Saprizio.
Mientras Dorotea era torturada, Teófilo, abogado de Saprizio le dijo de manera irónica: Oh tú, esposa de Cristo, mándame rosas y manzanas del paraíso de tu esposo. Ella respondió: Sí, te las mandaré.
En el lugar apareció un niño con tres manzanas y tres rosas, Dorotea le dijo, llévalas a Teófilo y dile: He aquí, te mando del Paraíso. Luego fue degollada.
Teófilo vio aparecer al niño con las manzanas y rosas, allí fue que exclamó: Cristo es el verdadero Dios. Sus compañeros le dijeron que había enloquecido y dio conocer a los presentes que se convertía en cristiano en ese momento. Entonces fue torturado y también asesinado.