Origen y conformación de los apellidos
Los apellidos nacen conforme crecía la población y las personas necesitaban identificar a sus familias para diferenciarse de otras.

Se dice que el uso de los apellidos se inició en la mayoría de países entre los siglo XII y el XX, pero ya se tenía conocimiento que algunos griegos, hebreos e indios utilizaban antes del siglo VII a.C. en forma similar a la actual.
En España el apellido legal se impuso en el mismo momento en que se regularizó el estado civil, al margen de los registros parroquiales.
ORIGEN
Los apellidos tienen diversos orígenes. Puede provenir de un nombre, un lugar, un animal, un oficio o una característica física.
Apellidos patronímicos
Muchos apellidos tienen su origen en un nombre propio.
En los apellidos ingleses (como Harrison y Morrison) aparece la partícula son (hijo). En los escoceses Mac o Mc. En los irlandeses O'. En los portugueses aparece -es y en los hispanos -ez.
En Castilla se utilizó la desinencia “ez”, aunque también es frecuente “oz”. Ambas desinencias equivalen a “hijo de” o “descendiente de”. Así,
González significaba “hijo de Gonzalo”
Ramírez, “hijo de Ramiro”
Sánchez, “hijo de Sancho”
Martínez, “hijo de Martín”
Pérez, “hijo de Pero (Pedro)”.
Lo mismo ocurre con Fernández, López, Hernández, Díaz, Estévez y Muñoz. Sin embargo, algunos apellidos no se transformaron y siguen siendo iguales a los nombres que los originaron. Por ejemplo, Alonso o García.
Apellidos toponímicos
Toman su denominación de un lugar, región, comarca o paraje en el que vivían, procedían o poseían tierras los antepasados. Muchos están precedidos de la preposición “de”, “del”, “de la” o simplemente son gentilicios (Arroyo, Ribiera, De la Vega, Molina).
Apellidos de oficios
El trabajo sirvió como medio de identificación y así surgieron apellidos como Cantero, Carnicero, Guerrero o Labrador.
Apellidos descriptivos
En ocasiones el apellido corresponde a características de quien lo lleva. Ejemplos de esto son los apellidos Alegre, Blanco y Moreno.
Apellidos castellanizados
Son aquellos que tienen origen en naciones o culturas distintas a la española y que, con el tiempo, fueron transformando su grafía, adaptándola a la fonética española.
Fuente:[Reniec]