Las ventas de automóviles nuevos en el Reino Unido cayeron en mayo un 89% interanual, su peor resultado desde 1952, debido al confinamiento decretado para luchar contra la pandemia de coronavirus, informaron el jueves los responsables del sector.
Las ventas de automóviles nuevos en el Reino Unido cayeron en mayo un 89% interanual, su peor resultado desde 1952, debido al confinamiento decretado para luchar contra la pandemia de coronavirus, informaron el jueves los responsables del sector.
Según la SMMT, la sociedad que agrupa a los fabricantes y vendedores, el mes pasado se vendieron 20.247 automóviles, es decir 163.477 menos que hace un año.
"Después de dos meses de confinamiento (...) y su impacto devastador en el mercado, la reapertura esta semana de los concesionarios va a ser un momento clave para el sector y sus miles de empleados", dijo Mike Hawes, director de la SMMT, en un comunicado.
En este contexto nefasto para la industria del automóvil británica, el fabricante de coches de lujo Aston Martin anunció la supresión de 500 puestos de trabajo en el marco de una restructuración y 1.500 serán destruidos por la cadena de concesionarios Lookers.
Aston Martin, que ya tenía dificultades financieras antes de la crisis sanitaria, sufrió la consecuencia de unos volúmenes de producción inferiores a lo previsto. Con estos recortes, espera ahorrar 10 millones de libras (12,5 millones de dólares) al año en costes operativos con la esperanza de recuperar la rentabilidad.
Por su parte, Lookers prevé el cierre de 12 concesionarios -que se agregan a otros 15 anunciados en noviembre- y el despido de casi 20% de su plantilla de 8.100 empleados como resultado del confinamiento. La cadena conservará 136 concesionarios en todo el país.
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