El gobierno de Estados Unidos anunció el miércoles la imposición de aranceles antidumping preliminares sobre algunos aceros para la construcción importados de China y México por valor de más de 1.000 millones de dólares.
En los resultados de una investigación preliminar, el Departamento de Comercio estima que los exportadores de China y México se han beneficiado del dumping para la fabricación acero estructurado -como vigas en I, varillas y viguetas- por cifras que "van de 0,00% a 141,38% y de 0,00% a 30,58%, respectivamente".
Las conclusiones del Departamento, que podrían revertirse, siguen a una decisión similar de junio pasado que abarcó a importaciones chinas de aluminio valoradas en casi 1.000 millones de dólares.
Fueron el resultado de un reclamo presentado en febrero por miembros del Instituto Estadounidense de Acero para la Construcción de Chicago.
En respuesta, el ministerio de Economía de México indicó que se trata de una investigación "habitual" del Departamento de Comercio estadounidense, la cual sigue en curso y cuyos resultados finales se esperan para fines de enero de 2020.
Agregó, en un comunicado, que "continuará apoyando a las empresas mexicanas involucradas en el procedimiento antidumping, y participando activamente en el procedimiento antisubvenciones".
"No se trata de una medida unilateral de parte de los Estados Unidos al acero mexicano, ni siquiera es a todo el acero mexicano, es simplemente al acero estructural" y específicamente a un grupo de empresas, dijo, por su parte, la ministra de Economía, Graciela Márquez, a la radio local Grupo Fórmula.
Como resultado del nuevo anuncio, se encargó a la Aduana de Estados Unidos la recolección de depósitos en efectivo de los importadores relevantes de acero estructural en base a las tasas de dumping determinadas durante su investigación preliminar.
Las autoridades indicaron sin embargo, que la investigación no había afectado a los marcos de acero de Canadá, que por el momento se libra de las tarifas antidumping.
En 2018, las importaciones de acero estructural provenientes de Canadá, China y México se estimaban en 722,5 millones de dólares, 897,5 millones y 622,4 millones, respectivamente.