BC de Brasil mantiene su tasa en su mínimo histórico de 6,5%

El Banco central de Brasil (BCB) mantuvo este miércoles su tasa de referencia en su mínimo histórico de 6,5%, en un contexto de incertidumbre sobre los rumbos económicos de la mayor economía latinoamericana, a menos de tres semanas de las elecciones presidenciales.

La decisión, adoptada por unanimidad de los nueve miembros del Comité de Política Monetaria (Copom) del BCB, concuerda con las expectativas de la gran mayoría de los analistas.

En su comunicado, el Copom se abstiene de dar indicios de cuáles podrían ser sus decisiones en las dos reuniones que aún debe realizar este año, el 30 y el 31 de octubre y el 11 y el 12 de diciembre.

Advierte sin embargo que "una frustración de las expectativas sobre la continuidad de las reformas y los ajustes necesarios de la economía brasileña puede afectar la prima de riesgo y elevar la trayectoria de inflación en un horizonte relevante para la política monetaria".

Las presiones inflacionarias, sustentadas principalmente por la depreciación del real frente al dólar (de cerca de un 20% este año), se vieron balanceadas por el escaso ritmo de la actividad económica.

Las previsiones del mercado para este año son de un aumento de precios (índice IPCA) de 4,09%, por debajo del centro de la meta del BCB, de 4,5% con un margen de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales.

La ralentización de la actividad se vio agravada por la prudencia de los inversores ante un panorama electoral incierto, sin ningún candidato de los preferidos por el mercado que despunte entre los favoritos para los comicios del 7 de octubre.

Brasil salió en 2017 de dos años de recesión, con un débil crecimiento de 1%. El gobierno apostaba a inicios de año por una expansión del PIB de cerca del 3% este año, pero redujo sus expectativas a 1,6%. El mercado prevé 1,36%.

La central Força Sindical criticó "el exceso de conservadurismo" del Copom, por considerar que las tasas, pese a estar en su mínimo histórico desde mayo, siguen siendo elevadas e inhiben el consumo, perjudican la producción y, por ende, la creación de empleos, en un país con casi 13 millones de desocupados.

La Confederación nacional de Industrias (CNI, central patronal) justificó en cambio la medida del Copom y afirmó que "el mantenimiento de las tasas en niveles bajos dependerá del ajuste de las cuentas públicas a largo plazo que haga el nuevo gobierno", que asumirá el 1º de enero.

El BCB interrumpió en mayo un ciclo de doce recortes consecutivos de la tasa básica Selic, alegando la "frustración" causada por el estancamiento de las medidas de ajuste.