Australia reducirá a la mitad el número de ciudadanos autorizados a regresar al país que lucha para contener un brote de coronavirus en Melbourne, la segunda mayor ciudad, anunciaron las autoridades el viernes.
A partir del lunes, solo 4.000 australianos o residentes permanentes podrán regresar al país por día en lugar de los 8.000 que se permite actualmente, dijo el primer ministro Scott Morrison.
El anuncio se produce después del reporte de 288 nuevos contagiados de covid-19 en el estado de Victoria, principalmente en Melbourne, la capital del estado.
Unos cinco millones de residentes del área metropolitana de Melbourne están confinados en un intento de doblegar la curva del brote, en un país que había logrado contener con éxito la epidemia hace semanas.
Australia impidió retornar a todos los ciudadanos y residentes permanentes a finales de marzo cuando el coronavirus se propagaba con fuerza.
Todas las personas retornadas tienen que someterse a cuarentena en hoteles, pero las autoridades achacan el brote en Melbourne al incumplimiento de los protocolos sanitarios y de seguridad durante esa cuarentena, ya que la mayoría de los casos registrados de covid-19 se han producido en personas retornadas al país.
Morrison dijo que las medidas para los australianos retornados se mantendrán hasta que se contenga la epidemia en Melbourne.