Tres motivos fundamentales por los cuales las empresas deberían desarrollar infraestructuras sostenibles en el Perú

La construcción, a lo largo de su ciclo y proceso, busca minimizar el uso de recursos naturales y reducir los impactos ambientales. Desde los materiales utilizados hasta la operación, el objetivo es generar el menor impacto negativo y el máximo impacto positivo en el medio ambiente, logrando esto mediante el ahorro de energía, agua y otros recursos no renovables.

Es fundamental crear conciencia y una cultura de protección y preservación de los recursos en nuestro país para asegurar y mejorar nuestra calidad de vida. El crecimiento económico debe equilibrarse con la sostenibilidad, buscando actividades de desarrollo compatibles con el medio ambiente y que respeten la igualdad social.

En este contexto, Mónica Llanos García, Jefe de Gerenciamiento de Tgestiona, destaca tres razones por las cuales las empresas deben invertir en infraestructuras sostenibles en el Perú:

1. Reducción del impacto negativo en el medio ambiente (huella de carbono): Mantener la estabilidad ambiental es crucial para la supervivencia a largo plazo del planeta. Reducir la huella de carbono es esencial para mitigar el cambio climático y preservar los recursos naturales.

2. Asegurar la calidad de vida para las generaciones futuras: Las decisiones actuales afectan de manera irreversible los recursos. Protegerlos y promover prácticas sostenibles garantiza que las futuras generaciones tengan acceso a un entorno saludable, recursos adecuados y oportunidades para prosperar.

3. Contribuir al cierre de brechas de déficit de infraestructura del país: La infraestructura sólida es clave para el desarrollo económico y social. Cerrar brechas asegura que todas las regiones y sectores tengan acceso a infraestructura básica como transporte, energía y comunicaciones.

La falta de sostenibilidad en las infraestructuras puede llevar a un aumento en los costos de mantenimiento debido al impacto del cambio climático en la producción de energía a partir de recursos no renovables. Por lo tanto, es necesario fomentar la inversión en infraestructuras sostenibles.

En el año 2022, según la revista Costos, alrededor de 150 proyectos obtuvieron certificación bajo el sistema LEED, y 100 proyectos estaban en proceso de certificación bajo el sistema Edge en el país. Esto indica que las empresas con iniciativas de sostenibilidad se certifican en programas como LEED, Edge, Breeam y Well, a cargo del Green Building Council Perú.

El certificado Bono Mivivienda Verde contó con más de 350 proyectos certificados, y en el sector comercial se certificaron 500 proyectos, aunque esta cifra es pequeña en comparación con la cantidad total de proyectos en el país en 2022. Un ejemplo específico es que solo el 50% de los nuevos edificios de oficinas busca algún tipo de certificación.

Finalmente, en 2022 se publicó el Plan Nacional de Infraestructura Sostenible para la Competitividad (PNISC) 2022-2025 a través del Decreto Supremo N.° 242-2022-EF. Este plan se centra en el desarrollo de infraestructura sostenible e incluye proyectos planificados, diseñados, construidos, operados y desmantelados de manera que garanticen sostenibilidad económica, financiera, social y ambiental. El PNISC prioriza 72 proyectos con una inversión de S/ 146,6 mil millones ejecutados mediante la modalidad de obra pública en sectores como Transportes, Comunicaciones, Agua y Saneamiento, Ambiente, Hidrocarburos, Electricidad, Riego y Producción.