Uno de los personajes más tradicionales en las fiestas navideñas es Santa Claus o Papá Noel. Un viejito barbudo en traje rojo y blanco, quien viaja por todo el mundo en un trineo, llevando regalos a todos los niños del mundo durante la noche de Navidad.
A este personaje se le conoce con muchos nombres: Santa Claus, San Nicolás, Viejito Pascuero, pero poco se conoce sobre el surgimiento de la costumbre de visitar a los niños en la Nochebuena, con regalos y golosinas en un costal, viajando en un trineo.
San Nicolás de Bari fue un santo muy popular, de quien se cree nació en el año 280 en Licia (Turquía) y falleció el 06 de diciembre del año 345. Fue un consagrado sacerdote, quien ejerció funciones de obispo en Mira (Turquía).
Era hijo de una familia acomodada y creció bajo los deseos tirantes de sus padres. Su padre quería que trabajase en el Mar Adriático, mientras que su madre pretendía que sea sacerdote como su tío, quien era obispo en Mira.
Una peste en la ciudad donde vivía acabó con la vida de sus padres mientras trataban de ayudar a los enfermos de la ciudad. Nicolás, repartió sus bienes entre los necesitados y partió hacia Mira, donde vivió con su tío y se ordenó de sacerdote a los 19 años. Al morir su tío, ejerció de obispo en la ciudad.
De San Nicolás se han contado muchas historias, como las de sus milagros y bondades con la gente pobre. Se convirtió en patrón de Grecia, Turquía y Rusia. Se de denominó "San Nicolás de Bari", cuando en 1087, los cristianos llevaron en secreto sus reliquias a la ciudad italiana de Bari con motivo de la invasión musulmana a Turquía.
Su relación con los niños nace en una historia que indica que alguien acuchilló a muchos niños, originando el rezo de San Nicolás por ellos, provocando la curación inmediata de los pequeños.
Su fama de repartidor de regalos se basa en la historia que cuenta que un empobrecido hombre, padre de tres hijas, no podría casarlas al no poder contar con dinero necesario para ello, por lo que estaban condenadas a ser "solteronas". Enterado de esto, Nicolás le entregó una bolsa llena de monedas de oro. Se cuenta que todo esto fue hecho en secreto por el sacerdote quien entraba por una ventana y ponía la bolsa de oro dentro de los calcetines de las niñas, que colgaban sobre la chimenea para secarlos.
Esto sucedió en New York en 1624. Cuando inmigrantes holandeses fundaron la ciudad de Nueva Amsterdam (hoy New York), llevando sus costumbres y mitos, siendo uno de ellos Sinterklaas, su patrono y cuya fiesta se celebra el 5 de diciembre en Holanda.
Recién en 1809, el escritor Washington Irving escribió una sátira "Historia de New York", en que definió a un santo holandés Sinterklaas en la burda pronunciación angloparlante Santa Claus, donde se hace versión a un Santa Claus enano y delgado, como un duende que regala juguetes a los niños en víspera de Navidad y que se transporta en un trineo llevado por nueve renos.
En 1863, Santa Claus adquiere su actual fisonomía de gordo barbudo y bonachón, gracias al dibujante alemán Thomas Nast quien diseñó este personaje para sus tiras navideñas en Harper's Weekly. Para esa época, "San Nicolás" no tenía nada que ver con "San Nicolás de Mira".
En el siglo XX, la empresa Coca Cola encargó al pintor Habdon Sundblom la remodelación de la figura de Santa Claus para hacerlo más humano y creíble. Esta versión es de 1931 en que la conocida empresa de bebidas, hizo popular los colores rojo y blanco para la identificación de este personaje.
El mito cuenta que Santa Claus vive en las proximidades del Polo Norte junto a la Señora Claus y a una gran cantidad de duendes navideños que ayudan en la fabricación de juguetes y regalos pedidos por los niños mediante sus cartas.
Para poder transportarlos, Santa Claus los guarda en un saco mágico y los reparte a las 00:00 horas del 25 de diciembre en un trineo mágico tirado por nueve renos, liderados por Rodolfo, quien ilumina el camino con su nariz roja y brillante.
Santa Claus ingresa a los hogares de los niños transformándose en una especie de humo mágico mediante una chimenea u otro espacio libre de las casas, dejando los obsequios al pie del árbol de navidad.
