Un comprador anónimo pagó la astronómica suma de 71 millones de dólares, un récord en Asia, para comprar un apartamento en Hong Kong, donde la burbuja inmobiliaria se ha convertido en un grave problema social y político.
Un comprador anónimo pagó la astronómica suma de 71 millones de dólares, un récord en Asia, para comprar un apartamento en Hong Kong, donde la burbuja inmobiliaria se ha convertido en un grave problema social y político.
El comprador pagó un total de 149,1 millones de dólares por dos apartamentos de lujo de 370 metros cuadrados cada uno situados en un barrio de lujo en lo alto de una montaña.
El más pequeño de los apartamentos costaba 71,1 millones de dólares, un precio récord al metro cuadrado en Asia, según la agencia Bloomberg.
En noviembre, un rascacielos en este territorio chino fue vendido por más de 5.000 millones de dólares. Y en junio, la ciudad batió el récord de la plaza de aparcamiento más cara del mundo, vendida por 664.200 dólares.
La grave crisis inmobiliaria en Hong Kong está obligando a muchos pequeños comercios a cerrar porque no pueden pagar el alquiler y a muchos habitantes a vivir en muy malas condiciones.
Casi el 20% de los siete millones de habitantes de Hong Kong viven por debajo del umbral de pobreza, según un estudio oficial publicado la semana pasada.
Los precios se han disparado en los últimos años en parte por la llegada de ricos inversores de la China continental.
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