El mercado de pescado, marisco, frutas y verduras de Tokio inauguró oficialmente este jueves su nuevo emplazamiento en Toyosu, en la bahía de Tokio, que a partir del 11 de octubre sucederá a la célebre e histórica lonja de Tsukiji.
El mercado de pescado, marisco, frutas y verduras de Tokio inauguró oficialmente este jueves su nuevo emplazamiento en Toyosu, en la bahía de Tokio, que a partir del 11 de octubre sucederá a la célebre e histórica lonja de Tsukiji.
"Toyosu va a prolongar la tradición" de Tsukiji, "ofreciendo una higiene de alto nivel", declaró este jueves a la prensa la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike.
El proyecto de mudar el mercado de abastos más importante del mundo existía desde hacía varias décadas, pero hasta ahora no se había podido concretar debido a la oposición de los comerciantes y a numerosos problemas técnicos.
Unos 900 invitados -mayoristas, pescaderos, autoridades regionales- y numerosos periodistas asistieron a una recepción en los inmensos hangares de un blanco inmaculado del nuevo mercado durante la cual se cortó la tradicional cinta roja.
Tsukiji, un lugar pintoresco con 83 años de historia, abierto hacia el exterior y rodeado de restaurantes ruidosos a dos pasos del centro de la capital nipona, será reemplazado por un lugar aséptico e impersonal rodeado de carreteras por las que circulan camiones a toda velocidad.
Toyosu tiene la ventaja de disponer de tecnologías modernas, a diferencia de Tsukiji que se había convertido en un lugar casi insalubre y vulnerable a los terremotos.
A partir del 15 de septiembre los turistas ya no podrán asistir a los remates de atún, una de las principales atracciones de Tokio, y a partir del 29 no podrán acceder al mercado.
Tsukiji cerrará sus puertas definitivamente el 6 de octubre.
La mudanza a Toyosu, una isla artificial en la bahía de Tokio, a 2,3 km de Tsukiji, es de una amplitud sin precedentes: en cinco días, unas 900 empresas cambiarán de lugar, dejando tras de sí unos puestos en los que cada día vendían 3.000 toneladas de mercancías, entre 480 tipos de pescado y 270 variedades de frutas y verduras, ingresando el equivalente de 17 millones de dólares (15 millones de euros).
Pero el espacio que dejan, de 23 hectáreas, también acoge "decenas de miles" de ratas, atraídas por los desperdicios del pescado y el laberinto de alcantarillas, según Tatsuo Yabe, especialista en desratización.
Terminada la mudanza, un batallón de expertos altamente cualificados entrará en acción para exterminar a miles de ratas y evitar que se propaguen por Tokio.
Tsukiji podría convertirse dentro de unos años en un parque de atracciones en torno al tema de la gastronomía japonesa, declaró Koike cuando anunció la mudanza definitiva del mercado.
"Tsukiji es una marca conocida internacionalmente", que atrae numerosos turistas cada año, reiteró este jueves Keiko.
Personal de cabina de Ryanair, llamado a hacer huelga el 28/9 en 5 países europeos
Sin acuerdo sobre el Brexit, Londres no pagará toda la factura
