MSF llama a la ONU y a donantes a movilizarse ante la catástrofe del coronavirus en Yemen

Médicos Sin Fronteras alertó el jueves ante la "catástrofe" en curso en Yemen, donde la pandemia del nuevo coronavirus se propaga por falta de medios humanos y materiales, en un país devastado por cinco años de guerra.

MSF hizo un llamamiento urgente a las Naciones Unidas y a los países donantes para "hacer más y hacerlo con urgencia, no sólo para Adén sino para todo Yemen".

Los trabajadores de la salud en el país deben ser pagados, dotados de equipos de protección personal y los centros de tratamiento deben abastecerse de respiradores, pidió.

El número de muertes en el centro de tratamiento covid-19 de MSF en Adén, la gran ciudad del sur donde también hay casos de dengue, paludismo y chicunguña, "representa una catástrofe más amplia" de lo que indican las cifras oficiales, advierte la oenegé en un comunicado.

"Lo que vemos en nuestro centro de tratamiento es sólo la punta del iceberg en términos del número de personas infectadas y moribundas en la ciudad", explica Caroline Seguin, directora de programas de MSF.

"La gente llega al centro demasiado tarde para ser salvada, y sabemos que muchos otros no vienen en absoluto", añade.

MSF afirma que 173 pacientes ingresaron en su centro y que, al menos, 68 fallecieron durante las dos primeras semanas de mayo.

El centro de MSF es la única estructura dedicada al nuevo coronavirus en el sur de Yemen. Los demás hospitales locales se niegan a acoger a los enfermos que presentan síntomas de la enfermedad por falta de equipo de protección para su personal sanitario.

Al estar controlada por separatistas que reivindican la independencia del sur del país, la ciudad de Adén no cumple con ningún confinamiento.

Las pruebas de detección de la enfermedad covid-19 son inexistentes, al igual que la cuarentena de las personas enfermas.