Unas 3.300 hectáreas de matorral se han quemado en el turístico sur de Francia en varios incendios desde el miércoles, dejando tres heridos, indicaron este jueves las autoridades locales, que temen que los fuertes vientos reaviven el fuego.
Unas 3.300 hectáreas de matorral se han quemado en el turístico sur de Francia en varios incendios desde el miércoles, dejando tres heridos, indicaron este jueves las autoridades locales, que temen que los fuertes vientos reaviven el fuego.
Uno de los incendios, que arrasó 2.500 hectáreas, "fue controlado esta noche a las puertas de Marsella, en el norte de la ciudad", declaró a la AFP un responsable de la prefectura, Jean Rampon, quien anunció también la quema de otras ocho hectáreas en la zona portuaria de Fos-sur-Mer.
El incendio cerca de Marsella, atizado por un mistral violento unido a la sequía, comenzó el miércoles a las 13H30 GMT en la pequeña localidad de Rognac, propagándose rápidamente a los terrenos colindantes de arbustos y bosque mediterráneo.
Este jueves por la mañana, el humo y el fuego eran de nuevo visibles cerca de Marsella, la segunda ciudad de Francia, que varios hidroaviones intentaban apagar, constató un fotógrafo de la AFP desde el puesto de mando instalado en la estación de trenes de Aix-en-Provence.
Rampon advirtió de que los fuertes vientos podrían reavivar los incendios y mostró su preocupación por la sequía de la vegetación.
Las autoridades desplegaron a 1.800 bomberos, un centenar de policías y gendarmes, 500 vehículos de socorro, 5 hidroaviones y dos helicópteros.
"Tenemos que lamentar tres personas heridas por quemaduras, entre ellas una de gravedad. El humo provocó malestar en unos 20 bomberos, así como en diez policías", afirmó Rampon, añadiendo que el incendio afectó varias casas y algunos edificios industriales.
Unas 500 personas fueron acogidas durante la noche en varios puntos.
La localidad de Vitrolles fue la más afectada, con 1.600 hectáreas arrasadas y 300 personas albergadas en polideportivos durante la noche.
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