Los países de la Unión Europea (UE) redujeron un 2,5% sus emisiones de CO2 en 2018, pero el esfuerzo se vio limitado por fuertes aumentos registrados en Polonia y Eslovaquia, anunció el miércoles la Oficina Estadística de la UE Eurostat.
Los países de la Unión Europea (UE) redujeron un 2,5% sus emisiones de CO2 en 2018, pero el esfuerzo se vio limitado por fuertes aumentos registrados en Polonia y Eslovaquia, anunció el miércoles la oficina Estadística de la UE Eurostat.
Las emisiones de dióxido de carbono que provienen de la combustión de las energías fósiles disminuyeron en 20 de los 28 Estados miembros, señaló Eurostat.
Las reducciones más importantes fueron constatadas en Portugal (-9% en comparación con 2017), en Bulgaria (-8,1%), en Irlanda (-6,8%) y en Alemania (-5,4%).
En cambio continuaron creciendo en Polonia (+3,5%), en Eslovaquia (+2,4%), en Finlandia (+1,9%), en Letonia (+8,5%), en Estonia (+4,5%), en Lituania (+0,6%), en Malta (+6,7%) y en Luxemburgo (+3,7%), indica Eurostat.
Las emisiones de CO2 contribuyen significativamente al calentamiento del planeta y representan alrededor del 80% del conjunto de las emisiones de gases de efecto invernadero en la UE.
Alemania aportó un 22% de emisiones de CO2 en la UE en 2018, seguida por Reino Unido (11,4%), Polonia (10,3%), Francia (10%) e Italia (10%). Letonia representa un 0,2%.
Alemania, Reino Unido, Francia e Italia se encuentran entre las economías líderes del bloque y son los países con mayor población.
Polonia, cuya población es significativamente más baja que los otros principales países contaminantes, depende de las anticuadas centrales eléctricas de carbón para generar casi toda su electricidad, aportando algunas de las emisiones de carbono más altas en la UE.
La UE se comprometió a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero un 20% en comparación a sus niveles de 1990 en 2020 y un 40% en 2030.
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