La AIE pide más esfuerzos para mejorar la eficacia energética

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) pidió a los Estados medidas disuasorias y más eficaces para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero, a pesar de los progresos de los últimos años.

En 2016, la intensidad energética, que mide la cantidad de energía necesaria para producir una unidad de PIB, volvió a disminuir, hasta 1,8%, lo que supone una caída continua de 2,1% por año desde 2010, indica la AIE en su informe anual sobre la cuestión publicado el lunes.

La eficacia energética "es el principal factor detrás de la estabilización de las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con el sector de la energía desde 2014", asegura la agencia.

Sin los esfuerzos llevados a cabo desde el año 2000, "el mundo habría utilizado 12% más de energía", el equivalente del consumo de la Unión Europea.

En 2016, la eficacia energética permitió por ejemplo a los hogares reducir globalmente entre un 10 y un 30% sus gastos energéticos (carburantes, calefacción, electricidad, etc), según los cálculos de la agencia. En la industria, el consumo por unidad de producción bajó en casi un 20% entre 2000 y 2016.

Sin embargo no hay lugar para la "autosatisfacción", según la AIE, porque en 2016 ha caído significativamente la puesta en marcha de nuevas políticas de eficacia energética.

La agencia destaca que hay "un potencial enorme" para que los edificios consuman menos así como en el sector de los transportes, donde sólo el 16% del consumo de carburante del transporte en carretera está sometido a una regulación energética.