Desde Brasilia (AFP)
Inminente avance de reforma de las jubilaciones entusiasma a los mercados en Brasil
La Bolsa de Sao Paulo superó el jueves por primera vez los 103.000 puntos, tras el inicio de una reunión legislativa que debe abrir el camino a una polémica reforma de las jubilaciones reclamada por los mercados para sanear las cuentas públicas de Brasil.
4 de julio de 2019

El presidente de Brasil Jair Bolsonaro, aquí en Brasilia el 4 de julio de 2019, quien propuso una reforma de la seguridad social considerada clave para sanear las cuentas públicas - AFP/AFP
La Bolsa de Sao Paulo superó el jueves por primera vez los 103.000 puntos, tras el inicio de una reunión legislativa que debe abrir el camino a una polémica reforma de las jubilaciones reclamada por los mercados para sanear las cuentas públicas de Brasil.
Hacia las 13H00 locales locales (16H00 GMT), el índice Ibovespa trepaba a 103.658 puntos, en alza de 1,58% respecto al cierre de la víspera. El dólar se negociaba a 3,791 reales, frente 3,827 el miércoles por la noche.
El entusiasmo de los operadores se debe a la posibilidad de que una Comisión Especial de la Cámara de Diputados apruebe este mismo jueves el informe sobre las reformas de las Jubilaciones, despejando el camino para que el proyecto sea tratado en el plenario de la Cámara y luego en el Senado.
La reforma de las jubilaciones es una de las promesas que le valieron al presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro el apoyo de los mercados en las elecciones de octubre pasado.
El proyecto inicial, elaborado por el ministro de Economía, Paulo Guedes, preveía un ahorro de 1,2 billones de reales en 10 años (más de 300.000 millones de dólares). Las modificaciones aportadas durante los debates redujeron esas economías a cerca de 1 billón de reales, una suma considerada aún aceptable por los inversores.
La reforma provoca fuertes resistencias de sectores que se verán perjudicados por el endurecimiento de acceso a una jubilación con beneficios completos.
Para pasar al plenario, la Comisión Especial debe aprobar el informe por mayoría simple de sus 49 miembros.
Pero para entrar en vigor, la reforma deberá ser aprobada por una mayoría cualificada de tres quintos de los escaños tanto en la Cámara como en el Senado, por ser de carácter constitucional.
El presidente de la Cámara, Rodrigo Maia, estima que el proyecto ya cuenta con los 308 votos necesarios (de un total de 513) para superar esa instancia y el gobierno acentúa la presión para que eso ocurra antes del receso parlamentario de dos semanas que empieza el 18 de julio.
- Bolsonaro aboga por los policías -
El propio presidente Bolsonaro, un exmilitar, actuó abiertamente para poner al abrigo de la reforma a los cuerpos policiales que dependen del gobierno federal, sin éxito hasta ahora.
Pero Bolsonaro, que el martes llegó a ser tratado de "traidor" en una protesta de comisarios en la Cámara de Diputados, no desiste de que sus planteos sean atendidos en los debates del Plenario. El jueves, en un desayuno con diputados de la poderosa bancada del agronegocio, pidió hacer uso de "sentido común", alegando que los policías "nunca tuvieron privilegios".
Guedes tuvo que resignarse por su lado a que los regímenes de pensiones que dependen de los estados y municipios quedasen fuera de su reforma.
Y, sobre todo, fue derrotado, al menos por el momento, en su tentativa de imponer una transición de un régimen de reparto a otro de capitalización, donde los beneficios se obtienen según las aportes individuales de los trabajadores a lo largo de su carrera.
Brasil es uno de los pocos países que no exigen una edad mínima para el retiro laboral.
El régimen actual permite jubilarse a las mujeres que cotizaron durante 30 años y a los hombres que lo hicieron durante 35, sin una edad mínima, aunque el monto del beneficio mejora para quienes prolongan su vida laboral.
Un beneficio parcial puede ser obtenido por mujeres de 60 años y hombres de 65 si suman 15 años de contribuciones.
La "Nueva Previsión" social impondrá una edad mínima para gozar de una jubilación integral: 65 años para los hombres y 62 para las mujeres que hayan cotizado durante 35 y 30 años respectivamente.
Algunas categorías tendrán algunas ventajas: los profesores podrán jubilarse 5 años antes (si cotizaron 25 años) y los policías y agentes penitenciarios podrán retirarse a los 55 (si cotizaron 30).