El turismo británico se volcará este verano en España y Portugal por el temor a atentados islamistas en Túnez o Egipto, dice un informe de las agencias de viaje británicas citado por la prensa este miércoles.
El turismo británico se volcará este verano en España y Portugal por el temor a atentados islamistas en Túnez o Egipto, dice un informe de las agencias de viaje británicas citado por la prensa este miércoles.
La Asociación de Agentes de viajes Británicos (ABTA) constató un aumento de 26% de las reservas de viajes a España este verano (boreal), de 29% a Portugal y de 18% a Chipre, e instó a la gente a contratar sus vacaciones ya, o corren el riesgo de no encontrar plazas.
"La caída de la actividad en destinos tradicionalmente populares como Túnez y Egipto, tras los incidentes terroristas de alta relevancia (...), ha llevado a un aumento de la popularidad del Mediterráneo occidental", afirman los agentes de viajes. "Los turistas que tarden mucho en reservar podrían tener más dificultades de las habituales", agregaron, revelando que el 65% de quienes planeaban viajar este verano ya contrataron sus vacaciones, según una encuesta entre 1.600 personas.
ABTA aconseja considerar alternativas al Mediterráneo, como el norte de España o Portugal -donde la garantía de buen tiempo es menor- y fechas alternativas a julio y agosto -los meses de las vacaciones escolares en el Reino Unido.
Treinta británicos murieron en una playa de Túnez en junio pasado cuando un hombre armado con un arma automática abrió fuego contra ellos. Ello llevó al ministerio de Relaciones Exteriores a desaconsejar todo viaje que no sea esencial.
Además, los viajes entre el Reino Unido y Charm el Cheij están prácticamente suspendidos desde noviembre, cuando un avión comercial ruso procedente de esta localidad de playa egipcia estalló cuando sobrevolaba la península del Sinaí, a causa de una bomba que mató a los 224 ocupantes.
Unos 15,7 millones de británicos visitaron España en 2015, el grupo más numeroso. El país recibió a 68,1 millones de turistas extranjeros ese año, un nuevo récord, con una subida de 4,9% con relación al año anterior, según datos del Instituto nacional de Estadística. Fue el tercer año consecutivo en que el país registró un récord histórico de visitantes extranjeros. España es el tercer país más visitado del mundo detrás de Francia y Estados Unidos, y por delante de China.
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