El paro registrado aumenta ligeramente en España pese al desconfinamiento

El número de parados registrados en las oficinas públicas de desempleo en España aumentó ligeramente en junio a pesar del fin del confinamiento aplicado desde mediados de marzo para frenar la pandemia, según los datos gubernamentales publicados este jueves.

El número de desempleados aumentó en 5.107 personas en junio hasta los 3,86 millones de personas, la cifra más alta registrada desde mayo de 2016, de acuerdo con la estadística del ministerio de Trabajo.

El incremento, sin embargo, es menor al experimentado en mayo (+26.573) y muy inferior a las cifras de marzo y abril, cuando los solicitantes de empleo aumentaron en más de 302.000 y casi 283.000 personas respectivamente.

El ministerio justifica este ligero aumento por el fin de la temporada de recogida de la fruta, que llevó a 25.000 agricultores al paro, y la incorporación al mercado laboral de 30.000 personas que estaban inactivas.

En cambio, el desempleo desciende notablemente en los servicios y la construcción, y en menor grado en la industria.

A finales de marzo, el Instituto nacional de Estadística (INE), cuyos datos se calculan de forma diferente y se toman como referencia, estimaba un total de 3,3 millones de desempleados en España. Los datos del segundo trimestre no se conocerán hasta final de julio.

En cualquier caso, estas cifras no tienen en cuenta a los numerosos trabajadores incluidos en los planes de suspensión temporal de empleo habilitados por el gobierno para evitar despidos masivos durante la pandemia del coronavirus.

Según el ministerio de Trabajo, más de 3,7 millones de personas se beneficiaron de estos planes que el gobierno recientemente prorrogó hasta finales de septiembre. De ellos, 1,57 millones ya se reincorporaron a sus puestos de trabajo, indicó el ejecutivo.

La pandemia del coronavirus, que dejó más de 28.300 fallecidos en España, impactó en un mercado laboral todavía frágil que, durante la crisis anterior, había rozado una tasa de desempleo del 27%.

A finales del primer trimestre, la tasa calculada por el INE era del 14,4%, la segunda peor de la zona euro después de Grecia. Para finales de año, el gobierno pronostica un 19%, por debajo del 20,8% previsto por el Fondo Monetario Internacional.