El británico Alok Sharma presidirá la COP26 de Glasgow

El británico Alok Sharma fue designado el jueves por el gobierno de Boris Johnson para presidir la próxima conferencia de Naciones Unidas sobre el cambio climático, la COP26, que debe celebrarse en noviembre en la ciudad escocesa de Glasgow.

En el marco de una remodelación gubernamental, Sharma, hasta ahora secretario de estado para Desarrollo Internacional, se convirtió en ministro de Empresa, Energía y Estrategia Industrial. Y fue designado para reemplazar a las riendas de la COP26 a Claire Perry O'Neill, destituida en enero.

Nacido en la India pero criado en el sudeste de Inglaterra, Sharma, de 52 años, trabajó en el sector bancario antes de convertirse en 2010 en diputado por el Partido Conservador.

Kat Kramer, responsable de cuestiones climáticas en la oenegé Christian Aid, recibió con agrado su nombramiento, aunque lamentó que Sharma llegue "tarde en el proceso".

El nuevo ministro debe abordar el cambio climático a nivel mundial, "pero también poner orden en el Reino Unido y promover políticas para acelerar la descarbonización", consideró.

Por su parte, la eurodiputada ecologista Caroline Lucas criticó el nombramiento, denunciando que Sharma votó 15 veces en el Parlamento británico contra medidas para hacer frente a la "emergencia climática".

"Eso no es compromiso. Nuestro clima, y la reputación del Reino Unido, no pueden permitirse a alguien tan poco entusiasta ante el enorme reto al que nos enfrentamos", tuiteó.

La COP25, organizada a última hora en Madrid después de que Chile tuviese que echarse atrás debido a las violentas protestas contra el gobierno, fue, según el secretario general de la ONU Antonio Guterres, una "ocasión perdida" de mostrar mayor ambición en la reducción de las emisiones de gases con efecto invernadero.

Tras su repentina destitución, O'Neill criticó muy duramente la actuación de Johnson en esta materia, afirmando que este, a quien acusó de "enorme falta de liderazgo", le confesó no entender realmente el cambio climático.

La organización de la COP26 provoca también tensiones entre Londres y el gobierno autónomo escocés de la independentista Nicola Sturgeon.

Aunque el gobierno británico se comprometió a celebrar la cumbre en Glasgow, también está considerando un lugar en Londres como medida de precaución, según un portavoz de Downing Street.