Desde Seattle (Estados Unidos) (AFP)

El avión supersónico pierde la batalla ante el verde

El petróleo barato será incapaz de hacer despegar al avión supersónico, consideran en Estados Unidos Boeing y las aerolíneas, que mantienen su prioridad en los aparatos que ahorran combustible y verdes.

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El avión supersónico de Air France Concorde el 17 de marzo de 2004 en Sinsheim, oeste de Alemania - AFP/AFP/Archivos
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El petróleo barato será incapaz de hacer despegar al avión supersónico, consideran en Estados Unidos Boeing y las aerolíneas, que mantienen su prioridad en los aparatos que ahorran combustible y "verdes".

"Un supersónico como el Concorde sigue siendo un sueño loco, pero hasta 2045-2050, no creo que ningún constructor aeronáutico se aventure" a fabricarlo, dijo a la AFP, Michel Merluzeau, experto de Frost & Sullivan, porque "no sería un buen negocio".

"Nuestra prioridad hoy son los aviones que economizan combustible", dijo a la AFP, Matt Miller, portavoz de American Airlines, que pasó una orden de compra por 500 aparatos que le serán entregados hacia 2020. "El avión del futuro debe responder a las necesidades de las aerolíneas y hablamos de ello con los constructores", afirmó.

En United Continental, un portavoz, Luke Punzenberger, concuerda: "Invertir en aviones que economicen combustible es la piedra angular de nuestra estrategia, en lo que se refiere a la flota".

El mensaje fue recibido. "Continuaremos remplazando las flotas (de las aerolíneas) por nuevos aviones más económicos en combustible. Actualmente nos concentramos en eso", anunció Doug Alder, un portavoz de la división Aviación civil de Boeing.

La energía representa el segundo mayor rubro de gastos de las aerolíneas, principales clientes de los fabricantes de aviones comerciales. Representa entre 20 y 35% del total, detrás de las retribuciones al personal, según los datos. Automáticamente, una factura de energía más reducida implica una mayor rentabilidad.

La lista de órdenes de compra de Boeing y Airbus están colmadas de pedidos de aviones de materiales compuestos como el 787 Dreamliner o las versiones remotorizadas de los muy vendidos A320 (A320 Neo) y 737 (737 Max), considerados menos ávidos de combustible, más livianos y aerodinámicos, que dan además una nueva imagen de los aviones del futuro.

La mayoría de los 500 aviones esperados por American Airlines, son 737 Max, A320 Neo y 787, indica el grupo. "Estimamos que eso nos permite reducir nuestra factura de kerosene en 35%", subraya el transportista estadounidense.

- Aviones conectados -

Hacia 2050, los aviones de línea tendrán siluetas más aerodinámicas, fabricados con materiales compuestos más livianos y resistentes, con alas optimizadas por "winglets" (aletas colocadas en la punta de las alas), describe Michel Merluzeau. También estarán equipados con motores más sobrios.

Para el pasajero, los mayores cambios estarán en el diseño delas cabinas, donde el acento será puesto en la interacción y sistemas de entretenimiento multimedia.

"Serán aviones más conectados. Redefinirán la noción de servicios para los pasajeros", adelanta Merluzeau.

Pero pese a la caída de los precios del petróleo bajo los 50 dólares el barril, la velocidad no parece ya ser el centro de la investigación y el diseño. Los aviones de línea continuarían volando a 900 km/hora.

Sin embargo, existe un nicho de mercado, el de los jets privados de negocios, cuya demanda no cesa de crecer en el marco de la reactivación económica en Estados Unidos. Estos podrían permitir superar nuevamente la barrera del sonido, recuperando la bandera abandonada por el Concorde, encarnación de la tecnología de punta aeronáutica.

La estadounidense Aerion Corporation desarrolla en asociación con Airbus, un AS2 que será capaz de unir París-Washington en tres horas. El grupo británico HyperMach promete iniciar la producción de su "SonicStar" a partir de 2020.

Dejando de lado los aparatos supersónicos, los grandes fabricantes de aviones invierten en la investigación sobre los combustibles (Airbus en base a algas, Boeing en el tabaco) con la esperanza de proponer aviones de linea menos ruidosos, con menor emisión de CO2, respondiendo así al endurecimiento de las reglamentaciones.

La investigación continúa también sobre el avión eléctrico con la pila de combustible o la energía solar. Airbus Group desarrolla el primer avión-escuela totalmente eléctrico y trabaja en el e-Thrust(un avión híbrido propulsado por dos motores eléctricos con fuselaje de fibra de carbono).



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