Enfrentar las intensas lluvias asociadas al fenómeno de El Niño ha llevado a la adopción de sistemas de drenaje como una solución efectiva

Recientemente, el Gobierno emitió una alerta ante la previsión de fuertes lluvias debido al fenómeno del Niño. Este tipo de situaciones, junto con los continuos impactos meteorológicos derivados del cambio climático, impulsa al sector agrícola a buscar soluciones innovadoras para optimizar la productividad de los cultivos y reducir al mínimo las afectaciones.

En este contexto, los sistemas de drenaje se presentan como una herramienta fundamental en la gestión de los suelos agrícolas. A través de una red de canales abiertos o tuberías subterráneas, estos sistemas controlan el nivel de acumulación de agua debajo de la superficie, evitando la saturación del suelo, el encharcamiento y fomentando un equilibrio hídrico óptimo para el desarrollo de los cultivos.

El exceso de agua en el suelo puede causar graves daños a los cultivos, especialmente a algunas variedades de frutas como aguacates, arándanos, uvas y cítricos. Por ello, cobra relevancia el uso de tuberías de PVC-U, que permiten drenar el exceso de agua en los suelos agrícolas sin afectar el sistema radicular de las plantas, preservando así su productividad.

"Los sistemas de drenaje son un recurso valioso y de bajo costo para el sector agrícola. Nuestras tuberías enterradas están diseñadas para soportar el peso del relleno y las cargas de maquinaria agrícola y otros vehículos. Además, su diseño perforado en todo el perímetro las hace altamente eficientes al permitir el ingreso del agua subterránea a bajas velocidades, en comparación con otros productos que pueden aumentar el riesgo de compactación del suelo y obstrucción del sistema de drenaje, al ser perforados manualmente", destacó el ingeniero Aldo Pasache, jefe del área técnico comercial de Nicoll by aliaxis Perú, empresa que ofrece el sistema Drenaloc para el drenaje agrícola.

Nicoll by aliaxis se compromete en desarrollar soluciones que contribuyan a una agricultura más sostenible, enfrentando los desafíos actuales del cambio climático y colaborando con la productividad y rentabilidad de los agricultores, al mismo tiempo que protege el medio ambiente.