Desde Tokio (AFP)

Unión de fuerzas en Japón para acelerar el despliegue del hidrógeno

Diez compañías japonesas y el francés Air Liquide lanzaron el lunes, bajo el patrocinio del gobierno nipón, una sociedad común destinada a acelerar la construcción de estaciones de recarga de hidrógeno en el archipiélago, con la esperanza de desarrollar el uso de esta energía.

industrie,automobile,énergie,environnement,co,entreprise
El director de la nueva compañía Japan H2 Mobility (JHyM), Hideki Sugawara (c) y los representantes de otras empresas, en rueda de prensa el 5 de marzo de 2018 en Tokio - AFP/AFP
Anterior Siguiente
Síguenos en Google News

Diez compañías japonesas y el francés Air Liquide lanzaron el lunes, bajo el patrocinio del gobierno nipón, una sociedad común destinada a acelerar la construcción de estaciones de recarga de hidrógeno en el archipiélago, con la esperanza de desarrollar el uso de esta energía.

El primer ministro Shinzo Abe ha hecho de ello un objetivo, y los constructores automotores nacionales Toyota y Honda ya se han adelantado al lanzar vehículos de batería con combustible alimentado por hidrógeno, cuya gran ventaja es no emitir en su combustión ninguna sustancia contaminante. Sólo se emite, en efecto, vapor de agua.

Pero el proyecto aún está en sus inicios. A fines de enero, el archipiélago tenía solamente 101 estaciones y 2.400 vehículos, la mayoría de ellos berlinas Mirai ("futuro", en japonés) de Toyota, lejos aún de las 900 estaciones y 800.000 vehículos que se esperan para 2030, en un mercado de un billón de yenes (EUR 7.700 millones).

Según el director de esta nueva compañía bautizada Japan H2 Mobility (JHyM), Hideki Sugawara, procedente de Toyota, se trata de la "primera iniciativa de este tipo" que une a constructores automotores (Toyota, Nissan, Honda), suministradores de infraestructuras (JXTG Nippon Oil&Energy, Idemitsu Kosan, Iwatani Corporation, Tokyo Gas, Toho Gas, Air Liquide Japan) e inversores (Toyota Tsusho, Banco de desarrollo de Japón).

Al unir sus fuerzas, estas compañías quieren "reducir el coste de construcción" de estas estaciones, atraer inversiones e impulsar a las autoridades a flexibilizar las normas, especialmente en términos de seguridad, muy duras en Japón para evitar fugas de hidrógeno, gas incoloro, inodoro y altamente inflamable.




Este sitio usa imágenes de Depositphotos