Desde París (AFP)

La remuneración del presidente de PSA genera polémica en Francia

La remuneración del presidente del grupo automovilístico PSA Peugeot Citroën, multiplicada casi por dos en 2015, para llegar a más de cinco millones de euros, desató una polémica en Francia, donde unos la califican de suma indecente en tiempos de crisis y otros de recompensa de un éxito.

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El presidente del directorio de PSA, Carlos Tavares, sonríe en la presentación de los resultados del grupo del año 2015, el 24 de febrero de 2016 en París - AFP/AFP/Archivos
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La remuneración del presidente del grupo automovilístico PSA Peugeot Citroën, multiplicada casi por dos en 2015, para llegar a más de cinco millones de euros, desató una polémica en Francia, donde unos la califican de "suma indecente" en tiempos de crisis y otros de "recompensa de un éxito".

El presidente del directorio de PSA, Carlos Tavares, ganó el año pasado 5,24 millones de euros, según unos documentos publicados el viernes. Se trata de poco menos del doble de su salario el año anterior (2,75 millones de euros).

El estado francés, que posee el 13,68% del capital de PSA, se opuso en vano a ese aumento de la remuneración, calificada este martes de "perjudicial" por el ministro de Finanzas, Michel Sapin. "Estamos en un momento en el que el esfuerzo es necesario" y ese esfuerzo debe ser "compartido", dijo Sapin.

"Es indecente", consideró, por su parte, el portavoz del partido ecologista EELV, Julien Bayou.

El secretario general del sindicato CFDT, Laurent Berger, afirmó que tal remuneración "no es legítima" y recordó que la empresa mejoró sus resultados "en gran medida gracias a los esfuerzos de los asalariados y la riqueza creada" por ellos.

En cambio, Tavares recibió el respaldo del empresariado. "Cuando hay logros, no me escandaliza que se recompense el éxito", declaró Pierre Gattaz, líder del Medef, la principal organización empresarial francesa, calificando a los empresarios de "héroes" que "asumen riesgos".

Por su parte, el presidente del consejo de vigilancia de PSA, Louis Gallois, afirmó que la remuneración de Tavares "no es desproporcionada" aunque pueda parecerlo a mucha gente. La misma es la consecuencia del "formidable éxito de enderezamiento de la empresa", dijo.

PSA es el primer grupo automovilístico francés, con 2,97 millones de unidades producidas el año pasado.

En 2014, afectada por la crisis del sector en Europa, estuvo al borde de la quiebra y fue salvado gracias a la intervención del estado francés y de la firma china Dongfeng. Ambos entraron en el capital de PSA a un nivel del 14%.

Tavares fue nombrado presidente del directorio del grupo, que se recuperó gracias a un plan de reducción de gastos, a través de esfuerzos pedidos a los asalariados, de una simplificación de las gamas y de cesiones (motos, club de fútbol FC Sochaux). En 2015, la firma obtuvo un beneficio neto de 1.200 millones de euros, su primer resultado positivo desde 2010.




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