Tensiones entre cameruneses y chinos por la explotación de oro

La explotación industrial de oro en el este de Camerún genera fuertes tensiones entre la población local y los encargados chinos, acusados de asesinato, acaparamiento de tierras y corrupción en un país donde la industria aurífera no está regulada legalmente.

Según la ONG bosques de Desarrollo Rural (Foder por sus siglas en francés), a principios de abril se prohibió a cuatro empresas mineras operar en el este de Camerún, incluida la compañía china Lu y Lang, bien implantada en la región.

En noviembre, un empleado de esta empresa mató a un camerunés que buscaba oro en la parcela de la la misma que reivindica su propiedad.

"Los aldeanos se rebelaron y mataron a su vez al chino" con piedras, explica Narma Ndoyama, agricultor en Longa Mali, pequeña localidad de esta región aurífera de Camerún donde se ubica la empresa.

La compañía minera ha retomado sus actividades en el emplazamiento de Longa Mali tras una breve interrupción. Pero la tensión está lejos de disminuir en la zona. Los chinos "mataron a mi hijo, pero no han hecho nada (por mi). Trabajan y nadie los molesta", espeta Philippe Balla, padre de la víctima.

"Hay conflictos a todas horas entre cameruneses y chinos" en torno a la explotación de oro en el este de Camerún, comenta Ndoyama.

Los habitantes reniegan de la compra "por unas migajas" de muchas tierras que fueron agrícolas en otro momento, según Michel Pilo, jefe del pueblo de Mali, que incluye a Longa Mali.

"Destruyen nuestros campos", acusa, afirmando que una parcela que valdría 500.000 francos CFA (750 euros) se compra por 80.000 francos (120 euros).

Y "no puedes oponerte porque si lo haces te arrebatan tu parcela sin compensación", cuenta bajo el anonimato un consejero municipal del barrio de Bétaré Oya, donde está Longa Mali.

- 'Nada de transparencia' -

En muchas ocasiones la población local ha pedido, sin éxito, que las autoridades regulen las disputas de tierras delimitando las áreas que pertenecen a todos y a cada uno.

Contactados por la AFP, varios encargados chinos de la región no han querido hacer declaraciones.

"Es muy fácil poner el anatema a los chinos pero ¿quién los trae (a la región)?", se pregunta Gabriel Yadji, representante regional en el este del ministerio de Minas.

"Son los cameruneses quienes los invitan a comportarse como lo hacen", añade, señalando las numerosas "ramificaciones" que conducen a la obtención de un contrato minero en Camerún.

De hecho, aún no se ha otorgado ninguna autorización oficial para una explotación industrial del oro, toda la producción es artesanal.

Individuos, cameruneses principalmente, alquilan o venden entonces sus autorizaciones de explotación artesanal (AEA) a empresas extranjeras.

"No hay transparencia sobre los procedimientos de adquisición de títulos mineros", explica la ONG bosques de Desarrollo Rural, afirmando haber intentado "en vano" acceder al registro de las AEA.

- 'El ejército protege a los chinos' -

En la prensa, los nombres de figuras de alto rango -generales, diputados, ministros, un sobrino del presidente Paul Biya...- son citados como poseedores de títulos mineros, sin que sea posible confirmar la información.

Por lo tanto, la obtención de estas licencias levanta sospechas de corrupción, no demostrables según las ONG. "El ejército protege a los chinos en detrimento de las comunidades ribereñas y participa en la intimidación y alboroto de las comunidades", informa anónimamente un ejecutivo de una de ellas, muy activa en el este.

No hay datos oficiales sobre las superficies concedidas para la explotación aurífera en el este de Camerún, una región rica en recursos pero que sigue siendo muy pobre.