Los bancos británicos Barclays, HSBC, Standard Chartered y RBS siguieron financiando a la industria del carbón tras el Acuerdo de París sobre el cambio climático en 2015, pese a las promesas del sector de respaldar las energías más limpias, señaló el jueves Greenpeace.
Los bancos británicos Barclays, HSBC, Standard Chartered y RBS siguieron financiando a la industria del carbón tras el Acuerdo de París sobre el cambio climático en 2015, pese a las promesas del sector de respaldar las energías más limpias, señaló el jueves Greenpeace.
En su conjunto estos cuatro bancos financiaron por casi 32.000 millones de dólares, entre 2016 y finales de septiembre de 2019, empresas con proyectos de construcción de nuevas centrales de carbón, una energía entre las más contaminantes.
La oenegé señala a HSBC como el que tuvo la mayor financiación (10.800 millones de dólares), seguida de Standard Chartered (9.600 millones), Barclays (9.070 millones) y RBS (2.280 millones), aunque este último no aportó fondos durante 2019.
Greenpeace obtuvo estos datos de las oenegés Urgewald y BankTrack a partir de un análisis de 258 empresas con proyectos de fábricas de carbón, 52 de las cuales fueron financiadas por bancos británicos.
"La industria del carbón está ahora viva únicamente gracias a la financiación de bancos como Barclays y HSBC", subrayó Rosie Rogers de Greeenpeace.
"El Reino Unido no logra claramente respetar su compromiso de luchar contra la crisis climática permitiendo a los bancos que financien la industria fósil más contaminante", agregó.
Greenpeace recuerda que los bancos en todo el mundo están cada vez bajo mayor presión para que se comprometan en la lucha contra el cambio climático habida cuenta de la enorme influencia que tienen en la financiación de proyectos energéticos.
Esta presión se ejerce particularmente sobre el sector bancario británico, que es el más importante de Europa y el cuatro del mundo, señala la oenegé.
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