El Rapid Viena austríaco invitó a sus aficionados a ayudar a derribar el estadio del club y ha ofrecido a sus hinchas la oportunidad de desatornillar asientos, agujerear paredes y cortar trozos de las redes de las porterías para llevarse a casa, anunció el equipo este miércoles.
El Rapid Viena austríaco invitó a sus aficionados a ayudar a derribar el estadio del club y ha ofrecido a sus hinchas la oportunidad de desatornillar asientos, agujerear paredes y cortar trozos de las redes de las porterías para llevarse a casa, anunció el equipo este miércoles.
Los precios en la 'Fiesta de la Demolición', que se celebrará el sábado, oscilan entre los 19,77 euros (24,94 dólares) -el año que se construyó el estadio Gerhard Hanappi- por asiento, los 18,99 euros por un trozo de red y los cinco euros por un pedazo de césped. "Daremos las herramientas necesarias, lógicamente con todas las medidas de seguridad pertinentes y con la presencia constante de nuestros empleados", afirmó el club.
El Rapid Viena, 32 veces ganador del campeonato austríaco, está construyendo una nuevo recinto de 22.000 localidades que debería estar terminado en 2016. Mientras tanto jugarán en el Ernst Happel, el estadio más grande de la capital de Austria.
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