Desde Washington (AFP)

Dólar y fin de huelga de puertos disparan déficit comercial de EEUU

El déficit comercial de Estados Unidos aumentó fuertemente en marzo y alcanzó su registro mensual más alto en casi seis años y medio, en un contexto de apreciación del dólar y el fin de una huelga portuaria.

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El déficit comercial de Estados Unidos aumentó fuertemente en marzo y alcanzó su registro mensual más alto en casi seis años y medio - AFP/AFP/Archivos
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El déficit comercial de Estados Unidos aumentó fuertemente en marzo y alcanzó su registro mensual más alto en casi seis años y medio, en un contexto de apreciación del dólar y el fin de una huelga portuaria.

Según los datos publicados el martes por el Departamento de Comercio, el déficit de la balanza comercial estadounidense se ubicó en 51.400 millones de dólares, en datos corregidos por variaciones estacionales, un incremento de 43,1% con relación a febrero, cuando se ubicó en su nivel más bajo en cinco años.

Se trata del mayor déficit desde octubre de 2008 y el incremento es el más fuerte desde finales de 1996, indicó el gobierno.

La amplitud de este brutal ahondamiento del déficit, impulsado por un histórico aumento de las importaciones (+7,7%) combinado a un estancamiento de las exportaciones (+0,9%), sorprendió a los analistas, que preveían un incremento de solo 11% del déficit comercial de bienes y servicios.

La apreciación de 15% del billete verde desde el verano boreal explica en parte el aumento del déficit.

Esta valorización encarece las exportaciones estadounidenses mientras abarata las importaciones. El "efecto dólar" puede verse sobre todo en los datos anuales, ya que el déficit comercial aumentó 5,2% en relación a marzo de 2014.

Pero, solo tomando en cuenta marzo, fue sobre todo el fin de la huelga de puertos del oeste del país lo que hizo aumentar el ingreso de mercaderías.

En marzo los puertos de la costa pacífica, que reciben sobre todo productos provenientes de Asia, pudieron desatorar la acumulación de importaciones bloqueadas. Así, las importaciones de bienes saltaron un histórico 9%.

En febrero, cuando la huelga todavía continuaba, el déficit comercial se había reducido fuertemente para caer a su nivel más bajo en cinco años, debido a una disminución de las importaciones.

"La mayoría de los bienes intercambiados con Asia pasa por los puertos que estuvieron directamente afectados por el conflicto social en los últimos meses", indicó Jesse Hurwitz, experto de Barclays Research.

La mayoría de los analistas estima que estas malas cifras comerciales de marzo deberían cambiar el mes siguiente: "las importaciones deberían moderarse en abril, llevando el déficit comercial a un nivel más normal", subrayó Paul Ashworth de Capital Economics.

El saldo del intercambio comercial estadounidense es de todas formas deficitario en forma crónica.

"No veo este fuerte aumento del déficit como una nueva tendencia de la economía estadounidense. Los datos de marzo son claramente debido a factores temporarios", enfatizó por su parte Hurwitz.

- Impacto negativo sobre el PIB -

De todas formas, el incremento del déficit en marzo es una mala noticia para el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del primer trimestre.

La primera estimación oficial publicada el 29 de abril anunció una desaceleración del crecimiento a 0,2% entre enero y marzo, en vez de un crecimiento de 2,2% el trimestre anterior.

Pero el dato fue estimado antes de que se conociera el volumen de importaciones, que implicaría un recorte en la cifra del PIB.

De esta forma, es probable que la segunda estimación del PIB estadounidense para el primer trimestre, que será anunciado el 29 de mayo, muestre finalmente una contracción de la actividad.

"Será una contracción modesta de 0,3% en ritmo anual", predijo Paul Ashworth.

En términos geográficos y datos brutos, el déficit con China subió 38,6% a 31.200 millones de dólares en marzo. También aumentó 35,7% con la Unión Europea.

Pero es con Japón que el déficit estadounidense aumentó más en marzo (70,4% a 7.100 millones de dólares), en un momento en el que los dos países se preparan para cerrar un tratado de libre comercio.




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