Por el Canal de Panamá, actualmente en fase de ampliación, podrán pasar a partir de 2019 más del 95% de los buques portacontenedores del mundo, lo que transformará el sector marítimo en América Latina.
Por el Canal de Panamá, actualmente en fase de ampliación, podrán pasar a partir de 2019 más del 95% de los buques portacontenedores del mundo, lo que transformará el sector marítimo en América Latina.
"Hasta después del 2019 lo que nosotros estamos viendo es que el 95,3% de la flota de contendores del mundo va caber en el Canal de Panamá. Vemos un buen futuro con nuestra expansión", dijo el administrador del Canal de Panamá, Jorge Quijano.
Las declaraciones de Quijano se produjeron durante la primera jornada de la conferencia internacional "TOC Americas 2015", que reunirá hasta el jueves en Panamá al sector naviero, portuario y marítimo del continente.
El Canal de Panamá, por el que pasa el 5% del comercio marítimo mundial, está en fase de ampliación para que a partir de abril de 2016 embarcaciones con hasta 14.000 contenedores -el triple de su capacidad actual- atraviesen sus aguas.
"En el futuro vamos a ser capaces de manejar embarcaciones de 13.000 y 14.000 (contenedores), pero no va a suceder en el primer año de operaciones sino probablemente en el segundo o tercer año", dijo Quijano.
Según expertos, el promedio de los buques que están fabricando las mayores navieras alcanzan los 12.000 contenedores, una cifra que llegará a los 21.000 en sólo dos años.
La principal ruta del Canal es desde China, Japón y Corea del Sur hacia la costa Este de los Estados Unidos.
Para América Latina destaca la ruta desde la costa oeste de Suramérica a la costa este de los Estados Unidos y a Europa.
El motivo principal del aumento de tamaño en los buques son los costos para el armador, que puede por un millón de dólares pasar a transportar de 6.000 a 12.000 contenedores.
"El desafío va a ser para los puertos y para la cadena logística en general", dijo a la AFP Hernán Salazar, director de Planificación de la naviera suiza MSC para Latinoamérica.
Según Salazar, se van a necesitar muelles con mayor calado que puedan operar estos superbuques, equivalentes a cuatro campos de fútbol, de manera simultánea y una mayor agilización aduanera.
"Con las nuevas naves no son muchos los puertos (en América Latina) aptos para recibir y trabajar de forma óptima, por lo tanto prevemos congestiones", advirtió Salazar.
El Canal de Panamá batió en el último año fiscal su récord de carga, al pasar por la vía, de 80 kilómetros, 340 millones de toneladas, período en que obtuvo ingresos totales por 2.610 millones de dólares.
Sin embargo, los expertos descartan que la mayor capacidad de los buques signifique obligatoriamente mayor comercio, debido principalmente a la desaceleración económica de China, la ca{ida de los precios de las comodities y una menor demanda del gigante asiático.
Además, prevén alianzas de las navieras y apuestan por la optimización de sus servicios.
"No podría hacer predicciones sobre incrementos en el comercio", pero "la demanda y el comercio como tal no está creciendo para Latinoamérica", dijo a la AFP Andrés Osorio, director de clientes para Latinoamérica de la naviera danesa Maersk.
Para Osorio, la ampliación del Canal "representa muchas oportunidades de crecimiento y para las navieras optimización en términos de network (redes) y cantidad de servicios", dijo.
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