24 Mar 2014

San Borja afianza desarrollo psicomotor y psicosocial de los niños

Decenas de niñas y niños afianzan su desarrollo psicomotor y psicosocial jugando y compartiendo con sus padres, gracias al programa gratuito "Niños virtuosos", creado por la Municipalidad de San Borja.

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Cada domingo, entre las 11.00 y las 13.00 horas, se reúnen las familias al lado del Parque de la Felicidad, cerca del cruce de las avenidas San Borja Sur y Boulevard, en las afueras del Cuartel General del Ejército, conocido como "Pentagonito".

El programa se desarrolla sobre una extensa área verde en la que se despliegan numerosos juegos y actividades lúdicas en las que los menores, siempre en compañía de sus padres, dan rienda suelta a toda su energía.

Juegos como box (no se incita a la violencia, sino que los niños golpean con guantes un saco colgado de un árbol), minitenis, bowling,  lanzamientos de puntería y pintado de muros, son el deleite de los pequeños.

"A través de los juegos, los niños mejoran su capacidad cognitiva, su motricidad y se vuelven más sociales. Mientras los niños disfrutan de las actividades, un grupo de psicoterapeutas los observa y brinda recomendaciones a sus padres sobre las reacciones y el comportamiento de sus hijos", explicó Marco Álvarez, alcalde de San Borja.

Agregó que este personal está atento para detectar cualquier trastorno emocional, conductual o neurológico en los niños y de esta forma orientar a los padres sobre el  tratamiento requerido para solucionar el problema.

Espacios enriquecidos

Ana Luisa Molina, encargada del programa municipal "Niños Virtuosos", señala que este programa de espacios enriquecidos está basado en investigaciones sobre trastornos del desarrollo.

Detalló que las actividades de la metodología de espacios enriquecidos se realizan al aire libre para poder potenciar los beneficios del entorno sin factores artificiales que perturben la atención del niño y su familia.

"Las actividades son terapéuticas y dan a las familias la posibilidad de estimular áreas del desarrollo con materiales al alcance de todos y a través de actividades de estimulación temprana, deportiva, artística y lúdica", anotó.

“Lo primero que hacemos en cada caso es una rápida detección si hay trastornos de desarrollo en el niño o la niña, para luego empezar a tallar en todas las áreas: cognitiva, social, motora y comunicacional. Esta metodología nace a partir de varias investigaciones sobre cómo el deporte y las actividades motrices ayudan a que los chicos presten más atención en el aprendizaje”, manifestó.

La especialista detalló que el programa aborda varias campos: el psicosensorial (estimulación temprana, percepción sensorial, sonidos, texturas, colores, cuentas, títeres); el social (fortalece la construcción de hábitos positivos); el de estructura (permite al niño organizar su técnica de trabajo en los juegos).

Asimismo, el de psico arte (trabajo en equipo con los padres a través del pintado de murales) y el de psicodeporte (fija la atención de los niños y devela sus conductas motoras).

“Por ejemplo, a un bebe de hasta dos meses se le observa para ver si fija la mirada, coge las cosas o responde con una sonrisa. Además, para los más grandecitos, nuestros juegos, como la pesca con imán o el box permiten desarrollar capacidades de atención y realizar movimientos circulares y de extensión, de brazos y manos, que después les ayudará al momento de aprender a escribir”, explicó Molina.

Cada domingo Niños virtuosos reúne en promedio a 100 niños y niñas. El único requisito es que vayan con sus padres, dijo finalmente.




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